Sociedad Benéfica de Historiadores Aficionados y Creadores

Cartelistas republicanos de la Guerra Civil española

60.- Cantos

Trabajó en Madrid para la Junta de Defensa y el PCE.

60.1.- Estupendo cartel que con dos tintas confecciona una belicosa estampa de los soldados del Ejército Regular, con la bandera del Frente Popular que es también la de las Brigadas Internacionales.

60.2.- Añoranza del 18 de julio, que en 1938 ya queda un poco lejos en el tiempo y sobre todo políticamente, cuando, precisamente muchos de los protagonistas de esa fecha están ahora murmurantes y descontentos, sin colegir, que la defensa del gobierno de la República es en 1938 literalmente la defensa de su vida y la de los próximos.

60.3.- Hermoso cartel a dos tintas. El remoquete de Obreras del hogar para las amas de casa está un poco forzado, pero en los tiempos que corrían, la palabra tenía mucha fuerza.

60.4.-  ¡Hombre!, el fusil del internacionalista, más parece una escopeta de guarda forestal, que un Moisin-Nagant, pero por lo demás, el cartel es muy bonito e inspirado.

60.5.- Republicanos, socialistas, comunistas, anarquistas, del Frente Popular, dicen que lo primero es ganar la guerra. Es en la zona Centro donde primero se llega a esta conclusión, Aragón costará más.

60.6.- ¡Desde luego! Esta es una de las principales ventajas del ejército rebelde, mandos profesionales y fogueados. Y sobre todo, disciplinados que no andaban con excusas ni pretextos. A mi entender, solo en dos ejércitos republicanos se igualó la disciplina rebelde: el Ejército del Centro (y no siempre) y el del Ebro.

60.7.- En muchos carteles, el morado de las banderas republicanas quedaba siempre desleído e incluso irreconocible. Había dificultades para aprovisionarse de tintas y los litografos se las veían y deseaban para componer carteles con más de tres tintas, y sobre todo algunos colores compuestos. Este es un caso.

60.8.- Llamamiento a la movilización y a la incorporación de la mujer a las tareas del campo. En realidad, el mensaje es sólo para movilizar al campesinado y quitarle posibles excusas, pues la mujer rural española llevaba incorporada a las tareas agrícolas desde Noé. Pero en fin...

60.9.- El famoso tren de los 40 días que pretendía abastecer a Madrid sorteando el cortado ferrocarril Madrid-Valencia que obligaba a desvíos innumerables que afectaban a la logística de la capital.  El tren de los 40 días llegó a terminarse (en más de 40 días desde luego) pero de manera precaria. Después de la guerra, obviamente, dejó de funcionar y en la actualidad es una vía verde, algunos la llaman Vía Negrín.

Véase: http://vicentecamarasa.wordpress.com/2010/05/11/el-tren-de-los-40-dias-un-recuerdo-de-la-guerra-civil/

60.10.- Madrid en guerra. Alimento para el espíritu en la ciudad cercada, cine, teatro, cafés y exposiciones. En este caso, de periódicos murales.

60.11.- El ruso, que parece un científico de los años treinta, al estilo del doctor Zarkov de la tira de Flash Gordon, suelta una riada de suministros para la cercada Madrid. Son los chicos de la Asociación de Amigos de la Unión Soviética, de la que sorprendentemente, formaban parte muchos artistas e intelectuales nada sospechosos de bolcheviques.