S.B.H.A.C. Sociedad Benéfica de Historiadores Aficionados y Creadores |
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3.2- Galería de brigadistas
internacionales en la GCe - De la M a la Z - |
Enlaces |
Wilfred Macartney (1899-1970) Periodista irlandés. De familia rica. Había estudiado en buenas instituciones. Se alistó en el ejército inglés durante la Gran Guerra. Trabajó en los ferrocarriles de Oriente Medio tras la guerra. En Irlanda había sido oficial de los Black and Tans. Se dice que trabajaba para la inteligencia británica y de hecho tuvo acciones en Irlanda de carácter represivo contra el IRA. Sin embargo fue denunciado y tuvo un proceso y fue condenado por espionaje a favor de la Unión Soviética. Al final de su condena partió para España como voluntario de las Brigadas Internacionales. Como tenía experiencia militar fue nombrado comandante del British Bataillon de las Brigadas Internacionales. Resultó herido de bala, al parecer accidentalmente, por Tom Wintringham, según unos, y por Peter Kerrigan, según otros. El incidente nunca quedó demasiado claro, y se llegó a hablar de que Macartney pretendía volverse a casa. En cualquier caso fue sustituido en la comandancia del British por Tom Wintringham, corresponsal del Daily Worker y miembro del Partido Comunista. Macartney es autor de una obra sobre su experiencia carcelaria que alcanzó notable difusión: Walls have Mouths. |
Nikolai Manzelinzep
Voluntario ruso americano que fue comadante de la XV Brigada Internacional al final de la guerra. |
Mirko Markovics (1907-1988)
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Inver Marlow (-1937) Periodista inglés del Dayly Worker de ideas progresistas que se alistó en la Brigadas Internacionales y que recibió el mando de la primera compañía del British con rango de capitán. A su llegada tenía 29 años y se inscribió con el nombre de John Scott. Murió a consecuencias de las heridas recibidas el 23 de febrero de 1937 durante la batalla del Jarama.
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Martino Martini (Alexandro Vaja)
Fue comandante de la XII B.I. durante algún tiempo, |
André Marty (1886-1956)
Marty organizó las Brigadas Internacionales como mejor pudo tratando de ponerlas en el frente cuanto antes, pues el mando republicano de Madrid estaba desesperado. En esta tarea, Marty, que abusaba de su pasado y era un maldito arrogante, mordaz y desconfiado, tuvo a su servicios los mejores hombres de los más importantes partidos comunistas del mundo. Luigi Longo (Gallo), Nino Nanetti, Giuseppe Di Víttorio (Nicoletti), Tom Wintringham, Peter Kerrigan, Hans Kahle, Jules Dumont, etc... Y sin olvidar a los miembros de la Comintern con experiencia militar como Manfred Stern (general Kleber), Janos Galicz (general Gal), Wilhelm Zaisser (general Gómez), Matei Zalka (general Lucacs) y Karl Swierczewski (general Walter). Y además de la ayuda de los lideres nacionales del los Partidos que no vinieron a España pero organizaban eficazmente la retaguardia. Marty, en Albacete las tuvo con casi todos, su staff y sus subordinados, comunistas o no. Interrogaba a los voluntarios dudosos personalmente con maneras humillantes, aunque con poco acierto pues se le colaron agentes enemigos, italianos, alemanes, franceses, Henri Dupré, ¡responsable de la intendencia! y hasta un miembro del US Army, el famoso Vicente Usera, que trataron de desorganizar y sabotear la retaguardia brigadista con alguna habilidad, levantando una pulsión conspirativa en Marty y en sus hombres de confianza. (3) Pero en cualquier caso, el voluntarismo internacionalista dio sus frutos y Marty pudo presentar en Madrid a la primera Brigada Internacional a principios de noviembre, sin armas, pero disciplinada y concienciada. Sus métodos disgustaban a todo el mundo, y curtidos líderes con años de dura militancia se mordían la lengua para no mandarlo a freír espárragos. Además, Marty, consciente de su poderío como Comisario General de las Brigadas Internacionales, y asumiendo que el Partido Comunista español le debía pleitesía, se las permitía de todos los tipos metiéndose en todos los guisos que podía. Sus detractores aseguran que mandó un informe al Comité Central del Partido Comunista francés alardeando que se había despachado a más de 500 agentes provocadores en las Brigadas Internacionales. Lo que es una gran mentira. No hay ninguna documentación ni rastro documental de tales fusilamientos, mas allá de la veintena de voluntarios fusilados con acreditación judicial en procesos sumarios reglados y por delitos militares castigados con la muerte en todos los ejércitos del mundo en estado de guerra. Eso en Albacete, pues también se fusiló a desertores capturados en los frentes y a delincuentes cogidos o denunciados por personal civil. Son muy conocidas las polémicas entre los dirigentes de las Brigadas Internacionales sobre el trato a dar a los desertores y a los delincuentes comunes. Marty no consiguió desenmascarar al principal agente de la extrema derecha en las BB. II., el francés miembro de "La Cagoule" Henry Dupré que contaba con varios compinches colaboradores en las brigadas. Este Dupré, un tipo duro y fanático, miembro de la siniestra organización terrorista de extrema derecha "La Cagoule" le hizo la pelota a Marty y le bailó el agua hasta que consiguió que Marty le nombrara responsable de la Intendencia, puesto del que Marty, expulsó de malas maneras al periodista Louis Fisher que lo estaba haciendo bien dentro de la general improvisación. Con la intendencia en manos de un fascista, se explicarían muchos fallos de municionamiento y desabastecimiento que tuvieron que soportar los voluntarios, y que se tradujo en bajas y desmoralización (4). El amigo Dupré, para no abusar de la suerte, se fue con Kleber a su Estado Mayor donde siguió haciendo de las suyas, hasta que se las piró a Francia donde fue un maldito chivato de los nazis durante la guerra y la Resistencia. El gobierno francés lo fusiló discretamente al final de la guerra. Marty y su personal organizaron una tropa de voluntarios, no profesional bajo mando no profesional, y crearon prácticamente un Cuerpo de Ejercito dentro del Ejército Popular (5) con dos divisiones, y brigadas independientes, unidades de caballería y de blindados, un regimiento de carros, grupos de artillería CC, pesada, y DCA. Unidades de ingenieros, zapadores, guerrilleros, contrainteligencia, y un excelente Servicio Sanitario Internacional con hospitales de personal voluntario internacional que salvaron centenares de vidas. Otra importante polémica fue el proceso de incorporación real de las Brigadas Internacionales en el Ejército Popular, en sus cadenas de suministros, en sus reemplazos y en sus mandos. La forma de hacerlo fue incorporando a las Brigadas Internacionales compañías enteras de soldados españoles con sus propios mandos y provenientes primeramente de unidades comunistas del Quinto, cerrado a partir de febrero de 1937 pero con gran herencia en el Ejército. Y posteriormente de reemplazos corrientes. Esta operación estaba fomentada por políticos como Prieto que desconfiaban del mando comunista de la Base de Albacete y por el Estado Mayor del Ejército Popular. El propio Partido Comunista Español apoyaba esta transición dentro de su conocida política militar de reforzar el Ejército regular de la II República. Además, solucionaba el grave problema de las bajas de voluntarios internacionalistas en las grandes batallas del final de 1936 y de todo el año 1937. Coincidió además con el periodo en que Marty no estuvo en España, llamado por el PCF y la Cominter de Moscú. Naturalmente entró en cólera a su vuelta, pero la cosa estaba hecha, y el Partido, es decir Togliatti, la había aceptado, pues la estrategia comunista en el Ejército era ahora controlar las principales unidades de choque y las grandes unidades, cuerpos y Ejércitos. Marty acompañó a las Brigadas Internacionales durante todo el resto de la guerra. Con la República partida en dos estableció sus base en Barcelona mientras se desmantelaba Albacete, y con la derrota pasó la frontera con sus hombres a los que siguió atendiendo. En Francia los diputados de la extrema derecha y la no tan extrema le montaron un pollo en la Asamblea francesa muy de acuerdo a la brutal agitación que llevaban practicando desde la llegada del Frente Popular, basándose en las denuncias sobre el fusilamiento por espionaje del comandante del batallón francés "La Marseillaise", Gaston Delasalle por su mala actuación en Lopera donde la compañía inglesa sufrió un gran descalabro y murieron los poetas Ralph Fox y John Cornford (6). La sesión parlamentaria hubo de ser suspendida. Y fue entonces, cuando los agentes nazis y franquistas pusieron en marcha su maquina de ensuciar la memoria de los internacionales (la de los republicanos españoles ya la tenían en marcha desde tiempo atrás), y en esa tarea, algunos antiguos comunistas que habían servido en la BB. II. prestaron su inestimable ayuda en el camino de la calumnia y la difamación. El primero de todos el escritor Gustav Regler, que quizá para salvar su piel de recién convertido al anticomunismo, ¡qué malos éramos!, inicia la leyenda siniestra de André Marty (7). No costa que los voluntarios llamaran a Marty "El carnicero de Albacete", le boucher, en España , ni "Murderman" al gran Bob Merriman. Todo son infamias surgidas a partir de los libelos escritos tras la guerra, en especial un panfleto de la propaganda franquista denominado: "Las Brigadas Internacionales según testimonios de sus artífices", más, los testimonios de ex-brigadistas huidos del comunismo que siempre hablaron de oídas y nunca presenciaron tales ejecuciones. Resumiendo, no hay testimonios presenciales de ningún tipo sobre estos supuestos fusilamientos. Nada menos que ¡500! que no dejaron ningún rastro... Lo que si se sabe a ciencia cierta y que testimoniaron muchos voluntarios, sobre todo en los Servicios Sanitarios Internacionales, los chorreos y las críticas injustificadas al personal por parte de Marty, los procedimientos burocráticos para impedir acciones urgentes, etc, etc... Estaban a la orden del día en Marty y en su personal de confianza, que se movían por motivos de partido, o incluso por envidias, o por paranoias conspirativas. Todos esto se resumía, como la vida misma, en que burócratas mediocres se defendían de las iniciativas de profesionales brillantes de cualquier empleo, con la amenaza desviacionista de turno. Y en esto Marty era el campeón. Era un hombre Made in Moscú, como decía Enrique Castro. Una desesperación para algunos comisarios, médicos y para los propios mandos de las BB. II. Por el lado de sus virtudes, Marty era un hombre de acero, un viejo luchador incansable que incluso llevó de nuevo al combate en enero de 1939 a los voluntarios acantonados cerca de la frontera francesa. Y fue Marty quién se lo pidió. Y como a tantos otros voluntarios de las Brigadas Internacionales que tras la guerra fueron castigados con la muerte, el ostracismo, o el exilio, por parte de Moscú o de sus propios Partidos Comunistas nacionales, Marty fue expulsado del partido Comunista Francés en 1953 precisamente por ir contra la línea oficial soviética que propugnaba la desestalinización a la muerte del padrecito Stalin. Abandonado de todos, Marty murió poco después, en 1956. Notas.- (1) La flota se encontraba anclada en el puerto fluvial de Galaz y era extremadamente difícil encontrar víveres frescos en plena guerra civil rusa. La mayoría de la marinería lo que quería era volver a casa y ser licenciados. (2) "En sustitución de la Legión extranjera (Tercio) creada por el decreto del 31 de agosto de 1920 (B.O. número 105) se crearán las Brigadas Internacionales como unidades del Ejército de la República. Las Brigadas Internacionales deberán constituirse por el momento sobre la base de que se formarán espontáneamente en el curso de la guerra actual y seguirán en su constitución las reglas que se señalan en esta orden." (3) Harry Fisher, brigadista del Lincoln, dice en sus memorias que conoció un voluntario brigadista compatriota Vicente Usera, que pertenecía a la inteligencia del Ejército Americano. Hecho que constató cuando se vieron después de la guerra. Parece que el US Army lo envió para ver que se cocía en las BB. II. Si el Ejército USA, envió un espía, que no enviaría el British Army, la Wehrmacht o L´Armée, permanentemente enemigos de la Comintern. De modo que la conspiranoia, pese a ser un defecto inherente en las mentalidades Made in Moscu, estaba bastante fundamentada. (4) Uno de los casos más sonados del mal funcionamiento de la intendencia brigadista fue cuando en el Jarama, la segunda compañía de ametralladoras del batallón británico comprobó con desolación que las cintas de las ametralladoras en su dotación llevaban un calibre equivocado. Se trataba de un error con cierta lógica, pues sus máquinas eran MG28, Maxims excedentes del ejercito Polaco y de origen ruso compradas por la república al gobierno polaco vía SEPEWE, pero que el Ejercito polaco había recalibrado para su munición estándar el 7,92 por contra de la munición original rusa del 7,62 que fue la que se suministró. Si fue un sabotaje, Dupré hilaba muy fino, pero muy probablemente se trató de un error de esforzados voluntarios en el servicio de intendencia ha meses civiles con escaso conocimientos de armas y calibres. Se dice que la falta de fuego automático del batallón británico en el Jarama le costo cien muertos cuando menos. Unos días después, al bon. Lincoln le pasó cosa parecida, pues de las ocho maquinas francesas que les proveyeron nadie fue capaz de hacerlas funcionar, eran las máquinas Saint-Etienne, retiradas por el ejercito francés en la Gran Guerra. (5) Evidentemente, las Brigadas Internacionales nunca actuaron orgánicamente como un Cuerpo de Ejército del Ejército Popular. (6) Este caso fue muy doloroso y quizá injusto, pero no fue Marty exclusivamente, hubo todo un movimiento de voluntarios del batallón en su contra, el propio Wintringham le consideraba un cobarde. Para los ingleses fue un duro trance pues perdieron dos intelectuales insignias de las Brigadas Internacionales en Inglaterra en un mismo día. (7) Una leyenda como la Leyenda Negra española, unas pocas verdades incomodas y un montón de mentiras vergonzosas. |
Stanislaw (Stach) Matusczak (1897-1955) Joven Minero polaco que trabajaba en una mina de carbón de Belgica, como miles de jóvenes polacos emigrantes económicos de principios de siglo. Con la invasión alemana de Belgica en la Gran Guerra y para evitar ser alistado por el Ejército del Kaiser huyó a Francia donde formó parte del Ejército polaco en Francia, el Ejército Azul que se le llamaba. Al final de la Gran Guerra volvió a su trabajo de minero teniendo activa participación en los sindicatos de izquierda y en el Partido Comunista Francés. Puede que regresara a Polonia donde tuvo actividad con el Partido Comunista Polonés. Fue enviado a Rusia a estudiar a la escuela Lenin para extranjeros. Marchó tempranamente para España al inicio de la Guerra Civil, y se sabe que formó un grupo de ametralladoras que combatió previamente a las Brigadas Internacionales. En Albacete fue nombrado Comisario Político del batallón Dombroski que daría nombre meses después a la XIII Brigada Internacional. Esta relacionado con la creación de la primera unidad judía de las Brigadas Internacionales, la compañía Nattali-Botwin. Y existe un documento firmado por él, ya de comisario de la XIII brigada y por el comandante de la XIII Brigada Janet Barwinsky. (1) Matusczak regresó a Bélgica antes del fin de la Guerra Civil española, aunque desconocemos los motivos (2). Caída Francia, Matusczak se integró en la resistencia belga (3). AL final de la guerra, Matusczak regresó a Polonia donde tuvo cargos políticos. Notas (1) Los voluntarios polacos, la mayoría de los cuales prevenían de Francia, bien exiliados o bien descendientes de emigrantes, mantenían difíciles relaciones con la Comintern, más si eran de ideas comunistas, pues en abril de 1938 el Partido Comunista Polaco fue disuelto por orden del Kan de todas las Rusias, el amigo Stalin. Las excusas de la Comintern fueron insultantes, que si estaba trufado de agentes nazis. Esto en plenos procesos de Moscú, encolerizaba al más templado. (2) Y tras la invasión alemana y como todos los ex-brigadistas y los propios españoles, encontró verdaderas dificultades para enrolarse en el Ejército Francés ni siquiera en la Legión Extranjera, sino en los Regimientos de Marcha de los Voluntarios Extranjeros, que eran batallones de tareas del ejército (embriones de los los futuros Grupos de Trabajadores Extranjeros de Vichy, auténticos batallones disciplinarios). Pero no solo presionaban las autoridades francesas, sino que el propio Partido Comunista Francés (PCF) y la Comintern les desanimaban para enrolarse contra el nazismo. Con la creación del Ejército Polaco de Sikorski en Francia (por segunda vez en Francia se constituía un ejército polaco), algunos brigadistas polacos se alistaron pese al maltrato y al desprecio que recibieron tanto de los franceses como de sus compatriotas recién huidos de la Polonia ocupada. Se sabe incluso de que algunos fueron obligarlos por los reclutadores de Sikorski a firmar una declaración de arrepentimiento y disculpa pública por haber participado en la Guerra Civil española en el Ejercito Popular. De modo que muchos se abstuvieron. (3) Durante los años 1942-43, los polacos tuvieron problemas con el PCF, sobre las dirección de la resistencia y los pactos políticos del comunismo francés. Todos los ex-combatientes del Dambroswky eran muy críticos con la línea del PCF pues se sentían muy maltratados, a los franceses no les hacía ninguna gracia que el peso de la resistencia la llevaran extranjeros ex-combatientes de la Guerra Civil española, incluidos los españoles, además los franceses eran muy tibios al respecto de organizar atentados, temerosos de las represalias. |
Robert Hale Merriman (1908-1938)
La XV brigada entró en acción en la batalla del Jarama con dos agrupaciones con un total de seis batallones, los batallones British, Lincoln y Washington por un lado y los batallones Spanish, Galindo, Six Frevier y Dimitrov por otro. En mitad de la batalla, su comandante Gal pasó a mandar la División de su nombre, mas tarde división Gal, más tarde 15 división internacional. Merriman fue nombrado comandante del batallón con el rango de mayor de milicias. Cuando el batallón partió para el frente estaba prácticamente desarmado y los pocos que tenían fusil portaban armas usadas y de distintos calibres, algunos antiquísimos. Las ametralladoras eran de un modelo francés retirado en 1914 por su complejidad y que llegó a manos rusas por la guerra civil. Antes de llegar a sus posiciones, los hombres recibieron entonces fusiles Mosin-Nagant fabricados en los Estados Unidos por Remington para el Zar en 1914 y calibrados para la munición rusa 7,62x54 mm. Venían en cajas de madera, llenos de apestosa grasa verde y algunos envueltos en periódicos mejicanos. Los voluntarios los apodaron "Mexicanskys". Hicieron sus primeras pruebas de disparo con el fusil en un descampado a medio camino del frente, un cargador de cinco para cada voluntario. Para la mayoría eran sus primeros disparos. Para desesperación de Merriman la tropa carecía de toda la utilería y herramientas necesarias para el combate en campo abierto. No había tampoco ni picos ni palas. No había mapas, ni telémetros, ni visores de trinchera. Apenas algunos viejos teléfonos de campaña. No había llegado todavía la cocina de campaña. Las ocho ametralladoras de la compañía de maquinas, un complicado modelo francés de la Gran Guerra, no habían podido ser probadas porque no las entendía nadie, y de hecho no llegaron a funcionar o muy poco, por falta de cargadores adecuados y personal especializado. Bombas de mano, unas pocas de variadas clases. De morteros de trinchera o artillería de acompañamiento de infantería, ni hablar... El batallón de Merriman quedó inicialmente en reserva mientras el bon, británico y el seis de Febrero combatían duramente llevando el peso de la lucha en el flanco izquierdo. El 19 de febrero se le ordenó al batallón Lincoln tomar el cerro Pingarrón, una posición ventajosa y bien armada que los rebeldes conquistaron el día 12, y cuyos accesos eran en completa descubierta. El cerro había sido tomado y perdido una y otra vez, por unidades españolas en concreto por la 1 Brigada Mixta de la reciente división Lister (la 11) que había protagonizado una ascensión nocturna (la especialidad de la Primera brigada) que bajo el mando del mismo Lister exterminó al batallón enemigo. El contraataque rebelde fue inmediato y Lister hubo de retirarse carente de fuego automático y escaso de granadas defensivas, volviendo a recuperarlo los rebeldes en una acción en la que perdieron el 80 por ciento de sus fuerzas. Hubo nuevos intentos de recuperar el cerro por parte republicana, incluso con el apoyo de tanques, pero los rebeldes se habían fortificado, consolidado su fuego automático cruzado, y bajo el mando de un oficial especialmente duro y valiente, aguantaron una y otra vez. Aun no habían iniciado el combate y ya el batallón tenía mas de media docena de desaparecidos cuyos camiones se equivocaron de ruta y fueron a caer en zona rebelde, donde los Regulares los fusilaron si mayor trámite. Llegados a sus posiciones con poca luz se dieron a la tarea de cavar pozos de tirador con las bayonetas rusas y los cascos. Una tarea titánica para aquellos pedregales. Al amanecer descubrieron que estaban bajo fuego automático y de mortero y que apenas podían sacar las cabezas de sus agujeros. Tras dos días así donde hubo que retirar a personal que perdió el control de sus actos, fueron evacuados de noche y emplazados al borde de la senda para iniciar a la mañana siguiente el ataque al cerro Pingarron, donde los hombres de Lister habían demostrado su buen hacer, pero no habían podido mantener la posición ante los hombres de Zamalloa, un héroe rebelde. El ataque, sin cobertura de fuego automático, sin apoyo artillero, ni aéreo, fue un fracaso. Hubo 60 bajas, con 20 muertos. Pero aún lo intentarían tres veces más con idénticos o peores resultados. La desmoralización fue terrible, las protestas aumentaron y Merriman las entendía perfectamente aunque era consciente como oficial con formación profesional que debía pararlas de inmediato. El día 27, el nuevo comandante de la Brigada el yugoslavo Vladimir Copic que había sido su comisario y que sustituía a Gal, ordenó a Merriman un nuevo ataque contra el cerro. Merriman, protestó pero fue despedido con cajas destempladas. Voy a mandar oficiales observadores para ver si cumples mis órdenes -le amenazó Copic. Merriman atacó, sabía que en la base de las Brigadas había habido juicios sumarísimos por cobardía ante el enemigo con resultado de fusilamiento, como el caso de Delasalle, por otro lado habituales en todos los ejércitos en guerra del mundo. Levantó a sus hombres y con el corazón angustiado por la previsible debacle ordenó el ataque. El batallón quedó en cuadro y Merriman recibió una seria herida en el hombro izquierdo. A Merriman lo llevaron al Hospital Internacional de Murcia. Envió un telegrama a Marion para que viniera a España (2). Allí, Marion contempló horrorizada que a falta de escayola para fracturas los médicos se habían visto obligados a enyesarle con yeso de obra todo la parte izquierda del torso hasta la cintura. Aquel peso estando de pié era demasiado para cualquier convaleciente. Para empeorar las cosas, estaba recibiendo informes de su batallón sobre el ataque del 27 que eran desastrosos. Mas de 120 muertos en aquel inútil ataque cuando ya la batalla estaba cerrada en tablas. Su animadversión contra Copic le enfurecía cada vez que recordaba la escena antes de caer, y las horas de sufrimiento en la ambulancia (3) y hasta aparcado en el cuartel general de Copic sin que este se dignara dirigirle unas palabras de consuelo. De Copic se dijo entre los voluntarios de la Lincoln que se comportaba como un arrogante hombre Made in Moscú. Sin embargo Copic estaba bien considerado militarmente por el mando republicano y durante toda la guerra se mantuvo en esta tónica, hasta que fue llamado a Rusia, donde poco después sería fusilado por la NKVD. Marion decidió quedarse un tiempo y para ello se alisto en las Brigadas Internacionales como administrativa en Albacete. Llevaba uniforme reglamentario y era la única americana en la base. Y Merriman se hizo cargo del mando de la base de las Brigadas Internacionales de Tarazona de la Mancha, e instruía, esta vez debidamente, a los nuevos reclutas que formarían en los batallones angloparlantes George Washington y MacKenzie-Papineau (Mac-Pap), que supuestamente era canadiense pero que estaba mandando por veteranos americanos. Merriman no participó en la batalla de Brunete, pero siendo muchos de los nuevos voluntarios, reclutas por él instruidos, esperó ansiosamente buenos resultados de los voluntarios americanos. Desgraciadamente, las tareas de los Lincoln superaban sus posibilidades, y aunque derrocharon valor en el ataque y cumplieron parte de sus objetivos, agotada la ofensiva, la defensa de las posiciones se hizo inhumana. Un curiosidad bélica es que el nuevo comandante del batallón Lincoln en Brunete fue el negro Oliver Law, el primer oficial de color en mandar una unidad de blancos norteamericanos. Law moriría en el ataque al cerro Mosquito y fue sustituido provisionalmente por el comisario del batallón, el competente Steve Nelson. Para la siguiente ofensiva, Merriman ascendió a mayor de milicias y fue nombrado jefe del Estado mayor de la XV brigada. En la batalla de Belchite, la XV brigada Internacional combatió como una autentica tropa de choque. Los rebeldes se defendieron heroicamente tanto en Quinto donde primero actuó el Lincoln, como en Belchite donde las condiciones del cerco fueron aún peores. La brigada había entrado en combate con nuevos reclutas, y con cuatro batallones, Lincoln, British, Mac-Pap y el Spanish. El número de soldados españoles de leva era muy alto en todos los batallones. Merriman era su Jefe de Estado Mayor y junto con Steve Nelson, comisario del Lincoln, tuvieron especial protagonismo en la toma de Belchite. Parece que Merriman encabezó ataques casa por casa, a bombazos de mano. Poco profesional para su cargo pero muy humano, para motivar a la tropa. Merriman quedó bastante contento de la actuación de los Lincoln en esta fallida ofensiva contra Zaragoza, (5) pero el Lincoln sufrió una verdadera conmoción ante el horror que vivieron en aquel mini Stalingrado, casa, por casa, defensa numantina de los rebeldes, muchos de cuyos soldados habían sido obligados a descalzarse para dificultar su huida. Barricadas hechas con cadáveres... En Teruel la actuación de la XV dentro de la 35 división de Walter fue colateral y se mantuvo en reserva hasta la batalla del Alfambra donde tuvo actuación poco destacada, pues la batalla ya estaba terminada. Posteriormente, la brigada fue trasladada a las trincheras que protegían Belchite. El 7 de marzo los franquistas lanzaron su ofensiva de primavera en el frente de Aragón. El 11 estaban en Belchite y obligaron a los voluntarios a retroceder. Todo el sector estaba en retirada y la XV se constituyó en retaguardia entrando en el grave peligro que tal posición supone en una retirada. Las unidades se fueron disgregando en pequeños grupos muy vulnerables. Copic, comandante de la Brigada fue herido y se le pudo retirar a un hospital, Merriman Jefe del Estado Mayor asumió ambas competencias, aunque ya no contaba con Steve Nelson, herido en Belchite y retornado a casa. Marzo fue terrible para el Ejercito del Este. Las unidades de choque de la República, muy castigadas en Teruel y con fuertes deficiencias armamentísticas y de personal, hubieron de volver al combate y contraatacar para tratar del salvar los puntos claves del frente de Aragón, Alcañiz y Caspe. Aunque eso fue imposible. A principios de Abril, un grupo de combate mandado directamente por Merriman cayó en una emboscada. No se sabe si fue capturado y fusilado junto con otros voluntarios, o murió en la misma emboscada, como asegura un posible testigo superviviente. Con Merriman caía una forma de trabajar con sus hombres, muy alejada de la de Andre Marty y que siempre benefició a los voluntarios sin perder nunca la autoridad ni descuidar la disciplina. Esta muerte fue una pérdida irreparable para los voluntarios y para la II República. Que la diosa Razón (nuestro recuerdo) lo tenga a buen seguro.
Robert Merriman con su mujer, Marion Stone,
Notas.- 1) A nadie le gustó el asunto y tenían razón, es conocido que el asesino de Trosky, Ramón Mercader, entro en Méjico con el pasaporte de un voluntario americano. (2) Era un buen momento para salir pitando de Rusia. Stalin estaba iniciando la segunda tanda de criminales purgas de valiosos y valientes comunistas, donde los torturadores hundían el alma de aquellos luchadores hasta la degradación más infinita haciéndoles confesar horribles conspiraciones que nadie se creía. Los viejos luchadores bolcheviques morían entre horribles torturas y procesos tan denigrantes que avergonzaban a cualquier mente despierta. (3) Un detalle especialmente de interés al respecto de los hospitales de campaña y las ambulancia republicanas, es que los sanitarios nunca ponían cruces rojas en los hospitales y las borraban con barro en las ambulancias. Pues los pilotos franquistas, "caballeros del aire" se decían, los tenían entre sus blancos preferidos después de las mujeres y los niños, a los que consideraban un bocado delicioso. Por eso, la lista de bajas del personal sanitario alcanzó el 50%, casi más que en primera línea. (4) La aviación rebelde, una vez derrotada la Fuerza Aérea republicana presente en la batalla, rompió toda la cadena de suministros y después pasó a bombardear las posiciones de primera línea a lo largo de todo el frente de la batalla. Las fuerzas del V y del XVIII Cuerpos de Ejércitos del Ejército Popular aguantaron hasta lo indecible, y hubo de todo, llegados los hombres a la desesperación. La tropa se vio abandonada a su suerte mientras sus mandos y comisarios recibían una y otra vez ordenes de contraatacar hasta que las compañías, los batallones y las brigadas de deshacían como azúcar en agua. Brunete fue terrible para los soldados republicanos en primera línea. La división de Lister, perdió prácticamente a todos sus mandos y oficiales, más de 300. En las brigadas internacionales ocurrió lo mismo. La batalla, se ha dicho, terminó en tablas, pero no es exactamente verdad, la batalla la perdieron los republicanos, pues además de no conseguir sus objetivos, sus mejores unidades quedaron destrozadas. Y aunque a los rebeldes les sucedió algo parecido y quedaron tan extenuados como sus adversarios, recuperaron parte del territorio perdido, tuvieron menos bajas y su moral no salió tan perjudicada como la de las brigadas internacionales, cuyos supervivientes, tras el desastre del Jarama, constataron sin ninguna duda que el Estado Mayor republicano los usaba como maldita carne de cañón, sin ninguna piedad, pues no había otra. (5) Aún habría en octubre una segunda ofensiva contra esta ciudad por parte de varios escuadrones de los recién llegados carros rápidos de caballería BT-5, que aquí fueron erróneamente llamados carros pesados, y que consistió en una estúpida carga de estos carros conducidos por personal de las Brigadas Internacionales, por el terreno menos adecuado y con jinetes de carros del batallón Spanish de la XV. Como se perdieron la mayoría de los BT-5 por la acción de la artillería rebelde, nadie quiso apadrinar la operación y se le echó la culpa a los rusos. Pero el E.M. la autorizó y Walter y el coronel Casado la dirigieron entre los días 11 y 20, perdiendo prácticamente todas sus unidades el Regimiento Internacional de carros pesados.
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Robert Minor (1884-1952)
Al su regreso a los Estados Unidos, trabajó como editor del Daily Worker. Se entregó a la lucha por los derechos civiles de los negros denunciando con sus esplendidas caricaturas contra los linchamientos. En 1948 sufrió un ataque al corazón y hubo de guardar cama. Afortunadamente esto le libró de la cárcel cuando en la caza de brujas, todos los líderes del Partido Comunista fueron arrestados y encarcelados. Robert Minor murió en 1952. Ilustramos con una caricatura contra los linchamientos de 1915... |
Boleslaw Molojec (Edward)
Polaco. Fue comandante de la XIII Brigad Internacional. |
Monnier.
Comisario de ediciones de la Brigadas Internacionales |
Karlo Mrazovic Gaspar (1902-1987)
Enviado a España se alistó en las Brigadas Internacionales y tras formar parte de la compañía yugoslava participó en combates siendo nombrado al poco capitán de la unidad. Con su compañero Blagoje Parovic editaban el periódico de las BB. II. "Dmitrov". Blagoje Parovic murió en la batalla de Brunete. Al poco Mrazovic fue nombrado para trabajar en la radio de las Brigadas Internacionales, cuya potente antena se encontraba en el edificio de la calle Velázquez sede de la Inspección general de las Brigadas (Longo). Al termino de la guerra Mrazovic regresó a Yugoslavia ilegalmente militando en el partido Comunista de Croacia donde adquiere responsabilidades importantes. Tras la invasión nazi pasa a formar parte de la resistencia croata encabezando lo que mejor sabía hacer, agitación y propaganda. Ya era miembro del Comité Central del Partido. Con la victoria de los partisanos sirvió como embajador en varios países, fue presidente del parlamento Croata, pais constituido en República Popular dentro de la República Federal de Yugoslavia liderada por Tito, también croata. Mrazovic murió en 1987 en Zagreb. |
Ferenc Münnich (1886-1967) Como muchos de sus camaradas húngaros, Münnich fue destinado en la Gran Guerra al frente oriental sirviendo en el Ejército Austro-húngaro. En 1915 fue hecho prisionero por los rusos y enviado a Tomsk en Siberia con otros muchos prisioneros de los Ejércitos de las Potencias Centrales. La presencia bolchevique en esos campos era notoria y exitosa pues muchos soldados presos de todas las nacionalidades se hicieron bolcheviques, combatiendo muchos de ellos en los Ejércitos rojos durante la Guerra Civil rusa. En el caso de Münnich, volvió a Hungría con Belan Kum, en su mismo caso, prisionero convertido en bolchevique, donde se proclamó primero la República Húngara, y más tarde la República Húngara de los Consejos, es decir soviética. Al fin de la República, muchos comunistas húngaros se dispersaron por el mundo y por Rusia. A la llegada de la Guerra Civil española, junto con un grupo de voluntarios húngaros marcharon para Barcelona y fundaron el grupo Rakosi, en honor de un líder comunista húngaro que penaba preso bajo el régimen fascista del Almirante Horty. Este grupo terminaría como batallón de las Brigadas Internacionales, pero durante algún tiempo combatió en el frente de Aragón englobado en las columnas del PSUC y de la JSU catalanas. Pasó luego a la XI Brigada y combatió en Madrid. En junio de 1937 estaba integrado en la 150 Brigada que fue Internacional durante un tiempo. Al mes siguiente estaba ya en la reconstruida XIII Brigada Internacional tras los amotinamientos de la batalla de Brunete. AL final de la guerra, los grupos de húngaros no podían regresar a su tierra y quedaron detenidos en la frontera francesa a la espera de acogida. En Enero de 1939 André marty reconstruyó con estyos voluntarios apatridas dos batallones de voluntarios para formar una nueva pequeña Brigada Internacional. Münnich fue comisario político del batallón Rakosi y obtuvo el mando temporalmente en 1938 de la XI Brigada Internacional. Al fin de la guerra pasó a Francia donde estuvo detenido y liberado posteriormente. En 1945 se afilió al nuevo Partido Comunista el Partido Socialista Unificado de Hungría. En 1956 se unió al renovador Imre Nagy y fue su ministro de Interior durante un corto tiempo. Presionado por los soviéticos respaldó la intervención rusa y huyó a Rusia volviendo al fin de la revuelta con Janos Kadar formando parte de su gobierno pro soviético y recuperando el Ministerio del Interior. Posteriormente obtuvo cargos más importantes en e los gobiernos sucesivos hasta que murió en 1967. |
Nino Nanetti (Bassi) (1) (1906-1937)
(1) Algunos historiadores dicen que su apellido eras Bassi, otros que era su nombre de guerra. Lo cierto es que cuando se le nombra Bassi nunca aparece su nombre de pila. Con lo que sigue quedando la duda. |
Lev Narvich Agente del NKVD que actuó en Francia, donde se hacía pasar por ruso blanco, Estados Unidos y en España. En Barcelona decía que era un voluntario internacional y confraternizaba con los líderes del POUM que eran su verdadero objetivo. Estaba muy bien relacionado y se dijo que actuó también con las Brigadas Internacionales con la intención de desenmascarar a los agentes nazis, tipo Henry Dupré, lo que evidentemente no hizo. Lo que sí pasó en 1938 es que grupos de autodefensa del ya clandestino POUM, lo identificaron y lo asesinaron arrojando su cadáver al mar. |
George M. Nathan (1865-1937)
En el Jarama, Nathan era Jefe de operaciones del Estado Mayor en la XV brigada y confrontó con Gal, jefe de la Brigada durante los primeros días de la batalla. Se cuenta que se paseaba por las líneas inglesas imperturbable con su pipa y su bastón, dándole consejos a Wintringham que mandaba el batallón británico. Cuando Gal fue nombrado jefe de la 15 División donde se integraba la brigada, y tomó el mando de la XV, el teniente coronel yugoslavo Copic, anterior comisario de la brigada, Nathan fue relevado por Klaus Becker en el Estado Mayor de la XV. En Brunete la XV brigada entró en acción, mejor instruida, mejor armada y con el apoyo de algunas armas pesadas. Los ataques siguieron siendo imposibles, pues los medios artilleros y aéreos no pudieron atender todas las peticiones en algunas acciones donde la infantería quedó clavada al terreno bajo un sol terrible y muerta de sed. Nathan era en Brunete jefe de operaciones de la XV brigada. Se sabe que Nathan se distinguió en varias desbandadas de tropas españolas e internacionales, y en eso estaba cuando resultó herido gravemente tras un bombardeo de aviones alemanes. Retirado de la línea bajo la sombra de un olivo, y viéndose en sus ultimas horas, este impávido inglés pidió a sus camaradas que le cantaran alguna canción revolucionaria para ayudarle a morir.
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Pietro Nenni (1891-1980)
En la Italia liberada, continuó en la política del PSI enfrentándose con De Gasperi y oponiéndose a la creación de un Frente Popular con los comunistas, inclinándose por una alianza con la democracia cristiana. En 1963 provocó que el ala de izquierdas del socialismo italiano se escindiera del PSI en un nuevo partido: PSI de Unidad Proletaria. En 1968 ambos partidos socialistas volvieron a unirse y Nenni fue nombrado presidente. No obstante un año después su postura de alianza con el centro fue derrotada en un congreso, y dejó sus cargos en el Partido. En 1971 recuperó la presidencia del PS hasta 1978. |
Steve Nelson (1903-1993)
Como Merriman, comandante del Lincoln en el Jarama, había sido herido, fue nombrado nuevo comandante el afroamericano Oliver Law, un sindicalista muy apreciado en el batallón, y fue la primera vez que un negro mandara una unidad de americanos blancos. La XV Brigada Internacional partió para la batalla de Brunete. Tres batallones eran angloparlantes, el Lincoln, el Washington y el British. Iban bastante bien armados, tenían munición y bombas de mano ofensivas y defensivas, ametralladoras Maxim rusas del 7,62, una compañía antitanque con piezas rusas del 45, y tendrían el apoyo de una compañía de tanques. La embestida contra las posiciones rebeldes fue muy dura y en el ardiente julio madrileño, algunas compañías quedaron clavadas por falta de apoyo artillero, en los trigales que anteceden al pueblo de Villanueva de la Cañada bajo el fuego automático de un par de ametralladoras colocadas en la torre del pueblo que dominaba completamente la llanura. No obstante, tomaron al día siguiente sus objetivos iniciales, hasta que reforzado el enemigo y traídas al frente sus tres fuerzas aéreas, Legión Cóndor, Aviazione Legionaria, y Brigada Aérea Hispana, la XV brigada paso a la defensiva pues no pudo tomar el cerro Mosquito, altura muy importante para decidir la batalla. Y para rematarlo, Oliver Law, cayó muerto en acción y Nelson hubo de tomar el mando del batallón temporalmente. La actuación del Lincoln pese a las numerosas bajas y a la bisoñez de muchos de sus miembros fue buena, con duros momentos de desaliento y otras acciones heroicas. Los dos batallones americanos fueron fusionados en el Lincoln-Washington. Ni un mes después, el Lincoln se encontraba enfrascado en otra ofensiva, esta vez contra Zaragoza. La XV brigada se distinguió en Quinto y en Belchite, ambas posiciones muy bien fortificadas, con abundante guarnición regular y de milicias derechistas. En Belchite, el Lincoln tuvo momentos muy duros en los que era imposible avanzar por el fortísimo fuego automático rebelde. Era su comandante Hans Amlie, un fornido voluntario que se encontraba con sus hombres a las afueras de Belchite sin poder avanzar ni retroceder, mientras los rebeldes se defendían en búnkeres de hormigón armado, con ametralladoras en las torres de las iglesias y en las ventanas del seminario. Nelson encontró la manera de rodear estos fuego moviéndose por túneles, sótanos y un canal hasta liquidar la resistencia rebelde. Se dice que la compañía contracarro de la XV brigada realizó más de tres mil disparos. El batallón Lincoln se comportó como una auténtica tropa de choque. Belchite le cobró a Nelson su tributo, fue herido y retirado a Valencia dónde tras su convalecencia fue enviado a casa. Se consolidó como dirigente del partido Comunista en Pittsburgh. Pero en 1950 y con la guerra fría la carcundia de la costa Este le acusó de sedición en aplicación de leyes antidemocráticas que el estado de Pensilvania tenía desde principios de siglo. Fue condenado a 20 años. Recurrida la sentencia al Supremo, fue anulada la sentencia con la razón de que la legislación que condenó a Nelson llevaba tiempo abolida, y Nelson pudo salir libre tras 6 años de injusta condena en 1956. Un años después abandonó el Partido tras la muerte de Stalin y la llegada de Jruschov y las miríadas de crímenes revelados por este dirigente ruso. Años después fue nombrado presidente de la Asociación de veteranos de la Brigada Abraham Lincoln (ALBA). Steve Nelson murió en 1993, Siempre fue recordado por sus camaradas en España, como el mejor mando y comisario que hubo en el batallón. Observe el lector en su retrato que porte más americano para las Brigadas Internacionales. |
Teresa Noce (1900-1980)
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Paddy O´Daire
Voluntario inglés que llegó a ser comandante del batallón británico |
Michael O´Riordan
http://irishcitizenarmy.tripod.com/waterford.html Otros links sobre Michael O’Riordan: http://www.communistpartyofireland.ie/spainn.html http://www.searcs-web.com/oriod.html http://www.leevalleyireland.com/michael_o_riordan_address.htm La imagen ha sido tomada de http://www.leevalleyireland.com/michael_o_riordan_address.htm Fuente: Antonio Díez
Nos comunica Antonio Diez que Michael O´Riordan falleció en Dublín el día 18 de mayo de 2006. Descanse en paz. Asimismo nos envía estos enlaces: En el primero se pueden ver imágenes del funeral de Mick O'Riordan, en el que los condolientes portaban banderas rojas mientras que para el féretro quedaban las banderas de la República de Irlanda y, por supuesto, de la República Española, demostrando así una vez más su compromiso con los ideales que defendió toda su vida. http://www.geocities.com/irelandscw/top-Gallery.htm En el segundo enlace hay una colección de enlaces a los obituarios aparecidos en los medios de comunicación, donde se repasa su trayectoria destacando su paso por España como un hito en la lucha antifascista internacional. |
Randolfo Pacciardi (1899-1991)
En diciembre de 1936 Pacciardi es ascendido a teniente coronel de milicias tomando el mando provisional de la XII Brigada teniendo un buen papel en la segunda batalla de la carretera de La Coruña. Durante todo el invierno, los garibaldis pelearon en todos los frentes de Madrid, batalla del Jarama incluida, donde la brigada tuvo buena actuación y Pacciardi es herido. En la batalla de Guadalajara, donde la XII brigada tuvo tan buena actuación, Pacciardi no participó estando la XII bajo el mando de Lucacs. Pacciardi tomó el mando de la XII al final de esta batalla y en junio de 1937, la XII participó en la ofensiva de Huesca con malos resultados. Muriendo además Lucacs cuando su auto fue alcanzado por un obús. En la batalla de Brunete ocupó Villanueva del Pardillo, pero se produjeron incidentes con la tropa que quedó muy desmoralizada. Esto le costó a Pacciardi el puesto que fue sustituido por Penchienatti (1). A Partir de aquí Pacciardi se distancia del gobierno republicano volviéndose muy crítico con la República, sin pararse un momento a pensar que su cese era obligado por los malos resultados de su mando, y además, subiéndose al tren de los defensores de los pobres poumistas y faistas a los que la República persigue por la trivial cuestión de que quieren destruirla al alimón que Franco. Exiliado a los Estados Unidos con la caída de Mussolini regresa a Italia, donde ejercerá cargos políticos cada vez más escorados a la derecha. (1) Véase más abajo. |
Will Paynter
Voluntario inglés que fue comisario político de la Base de Albacete durante algún tiempo. |
Oscar Pantoja Velazquez
Información e imagen facilitada por Oscar López Cárdenas. |
Blagoye Parovic
Yugoslavo. Comisario en la XIII Brigada Internacional. |
Giuliano Pajetta (Camen)
Italiano. Comisario político de la XIII Brigada Internacional durante algún tiempo. |
Carlo Penchienati (1899-)
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Felice Platone "Gamba" (1896-1962)
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Joseph Putz (1895-1945)
Durante la batalla del Jarama, el general Walter que mandaba la XIV brigada pasó a mandar una división provisional de su nombre, e interinamente, Putz tomó el mando de la Brigada hasta que se nombró a Jules Dumont en abril. Además fue herido y hubo de convalecer. La urgente necesidad de militares con experiencia en el Ejército del Norte impelió al E.M. a enviar a Putz a ese frente en mayo de 1937 y tomó el mando de la 1 División en el frente vasco. Putz destacó como buen oficial de amplios recursos defendiendo Bilbao. De vuelta a la zona Centro se incorporó a la 35 División Internacional. No contaba con el apoyo de Marty y se airearon asuntos de su época de funcionario municipal, por lo que Marty le abrió un expediente de depuración. Para entonces, su compañera, Gisele Thessee se había venido a España y trabajaba con la Sanidad de los Internacionales. Esto no le hacía ninguna gracia a Marty como ya le pasó a Bob Merriman con Marion y a Wintringham con Kitty (1) y además Marty ataba muy en corto a sus compatriotas, sabiéndose apoyado por el PCF. Retornó a Francia a finales de 1938 y recuperó su empleo municipal aunque fue destinado a Argelia. Allí le cogió la Segunda Guerra mundial y se unió al Ejército de la Francia Libre en una unidad motorizada del Regimiento de Marcha del Tchad donde participó en duros combates con las tropas del Africa Korps cuando los territorios franceses del África del Norte se decantaron por De Gaulle, tras el desembarco americano. Posteriormente el regimiento se integró la en la Segunda División Blindada ya en Inglaterra con la que participó en la Invasión. Mandaba el batallón donde se encuadraba la Novena compañía, que estaba integrada por republicanos exiliados en África (2). Con esta división avanzó por toda Francia hasta llegar a la frontera alemana y combatir en la propia Alemania. Unos meses antes del final de la guerra cayó muerto en Grussenheim (3). (1) Merriman fue comandante del Bon. Lincoln y Wintringham lo fue del bon. Británico, ambos en el Jarama. (2) No deja de ser curioso que Putz, teniente coronel en el Ejército Popular y con mando de brigada fuera nombrado comandante de batallón de la división Leclerc, la joya de la corona del Ejercito Francés Libre. Y el mayor Amado Granell que había mandado exitosamente una Brigada Mixta en España fuese nombrado sólo Alférez en la novena compañía. Luego lo ascendieron a teniente. A ver cuando alguien produce una serie al estilo de Hermanos de Sangre sobre la epopeya de La Novena que no solo combatieron desde España hasta Alemania pasando por África, sino que su nivel de bajas fue del 85%. (3) Hay relatores sobre el personaje de Putz que matizan sobre su adscripción al comunismo, advirtiendo que de comunista nada. Tal cosa la dice Aldo Morandi en sus memorias. Y abunda más, Putz que había ganado la Legión de Honor en la Gran Guerra, sería en realidad un agente del Ejército Francés en las BB. II. Apoyan sus afirmaciones en la facilidad con que se reintegró en la estirada administración colonial francesa a pesar de su actuación en el caso Delasalle, unos de los mantras anticomunistas de la derecha francesa del año 39. En mi opinión esta afirmación no tiene ningún sustento documental hasta la presente. |
Laszlo Rajk (1909-1949)
Rajk escapó de Francia y se incorporó a la resistencia en Hungría. En 1944, el partido fascista "Flechas Cruzadas" lo arrestó y fue enviado a un campo nazi donde sobrevivió gracias a la ayuda de su hermano. De vuelta en la Hungría liberada por el Ejército Rojo, participó en la política nacional, no en vano había sido antes de su detención Secretario general del Partido Comunista Húngaro. Fue nombrado Ministro de Interior reorganizando los servicios de inteligencia y policiales. Enfrentado políticamente a Mátyas Rakosi, su propia policía le acuso de falsos cargos y tras un delirante proceso marca Stalin, se iniciaron las purgas que asolarían a los comunistas molestos o que habían combatido en España, tanto en Hungría como en otros países eslavos. En octubre de 1949 fue fusilado. Otro comunista más, voluntario internacional, asesinado por Stalin y su demente corte.
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Heinrich Gottlob Rau (1899-1961)
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Nino Raimondi
Fue comandante de la XII B.I. durante algún tiempo. |
Raimondo (Battistatta)
Fue comisario de la XII B.I. |
Gustav Regler (1898-1963)
La llegada de la Guerra Civil española agitó aquellas aguas procelosas donde nadaban todos ellos y la mayoría se acogió a este salvavidas moral que suponía tener una oportunidad de darle una patadita en ese sitio al fascismo y sus primos. Así que en septiembre de 1936 como miembro de la Asociación de Escritores Antifascistas y acompañado del poeta Louis Aragon y del periodista Kurt Stein se presentó en Madrid como corresponsal del Deutsche Zentral Zeitung, conocido como DZZ y que era un periódico en alemán publicado en Moscú por la Kominter. Se le pidió que dirigiera los Servicios de Propaganda del Partido y en definitiva de la República y aceptó encantado pues tenía experiencia y cabeza. Dicen algunos relatores que su amigo Louis Aragon también quería el puesto. Como miembro del KPD y con experiencia militar en la Gran Guerra, Regler estaba moralmente obligado a ingresar en las Brigadas Internacionales que a toda prisa se estaban formando en Albacete. Se dice en la red, que a su llegada a Albacete, André Marty, a la sazón baranda de las BB. II. le pidió el carné de POUM a Regler, para vacilarle, claro. (1) Pero no me lo creo y además es imposible, en septiembre de 1936, el POUM era la última de las preocupaciones de los jerifaltes comunistas. Aunque Marty era muy suyo, pero se han dicho tantas calumnias de este señor... Regler es destinado a la XII Brigada Internacional como ayudante de Luigi Longo que fue el primer Comisario de la Brigada mientras estuvo organizándose en Albacete, pues de momento sólo estaba formado el batallón Garibaldi de italianos. Pero al marchar al frente, Regler le sustituyó. La XII B.I. tuvo un arranque muy duro con batallas terribles donde se perdieron muchos y buenos voluntarios. Aseguran relatores que estuvo presente cuando hirieron de muerte a Hans Beimler comandante del batallón Thaelmann en la ciudad universitaria. De esta muerte también se acusó a malvados comunistas. Un poco estúpido matar así a un combatiente, cuando los de la trinchera de enfrente lo hacían gratis, como Durruti, vamos... (2) Aunque se dice que Regler fue herido de levedad en la batalla de Guadalajara en marzo de 1937, hay una imagen en la plaza del pueblo de Trijueque, probablemente cerca del final de la batalla, donde se le ve aparentemente indemne. Unos meses después fue herido de nuevo en el frente de Huesca y retirado del frente. Viajaban en el coche del general Lukacs que andaba haciendo el loco por primera línea en plena ofensiva republicana para animar a la tropa cuando un obús rebelde los alcanzó. Lukacs murió y Regler quedo seriamente herido. Convaleciente aún, tuvo fuerzas para dirigir una palabras a los escritores del II Congreso Internacional de Escritores por la Defensa de la Cultura en sus primeras sesiones en Madrid en junio de 1937. En Valencia también intervino y fue muy aplaudido por sus colegas. Licenciado, fue enviado a Francia en misión para los Servicios de Propaganda de la República, tarea que ya había realizado también en España. Y allí le pilló el final de la guerra. Poco tiempo después fue internado por los franceses en un campo de concentración para "extranjeros indeseables". Debió ser como un gran club de excombatientes en España, solo que en prisión. Este trance fue muy duro para todos. Los brigadistas sabían lo que se cocía en Berlín y en Moscú y qué se aventaba con el pacto Molotov-Ribbentrop. La desmoralización debió ser general sobre todo en gentes que se habían acercado al comunismo como mejor forma de combatir al fascismo pero que en realidad no tenían madera de comunista, una madera dura y fría como sabemos todos los en el mundo hemos militado en el Partido Comunista alguna vez. (3) Este pacto aparentemente contra natura y otras cosas que se habían vivido en España afectaron profundamente a muchos luchadores comunistas, y también le pasó factura a Regler. Además estaba la propaganda y el cisco que se montó en la izquierdas españolas al final de la guerra donde se bombardeaba a la vez a los militantes derrotados con propaganda derechista y con propaganda supuestamente de izquierdas, contra el gobierno republicano de Negrín y sus apoyos comunistas. Era muy difícil mantenerse entero ideológicamente. Derrotado, apátrida y preso de una supuesta democracia parlamentaria que trataba a los antifascistas españoles como delincuentes y a los voluntarios de las BB. II. como indeseables. Regler dejó el KPD en un momento muy perjudicial para él. Afortunadamente, no sabemos si escapó o fue liberado, pudo tomar un barco y exiliarse en Méjico con su esposa. Allí se acomodó como mejor pudo y escribió varios libros sobre Méjico. Regler se movía entre los círculos de alemanes exiliados y antifascistas de toda Norteamérica. En 1949 regresó a Alemania, concretamente a la zona Occidental. Era un escritor ex-comunista en el inicio de la guerra fría, y quiso partir para los Estados Unidos, pero hasta 1959 no consiguió el permiso pues pesaba mucho su pasado político. No obstante tuvo éxito y fue aceptado por la intelectualidad americana. Murió repentinamente en 1963 en un viaje por oriente. Sus memorias se publicaron en alemán en 1958. Su más conocido libro sobre la Guerra Civil española llevó por título "La gran Cruzada". Es un libro de interés, pero es el libro de un hombre derrotado, que desprecia en el fondo al Ejército Popular, esto es, a los milicianos y soldados españoles. Regler escribe con mala conciencia y también con mala leche, no en vano fue uno de los iniciadores de la leyenda negra de André Marty. Sabiendo, además, que tiene que hacer algún gesto para ser a aceptado en el paraíso capitalista en el que aspira a vivir como escritor y periodista. El anticomunismo, versión anti-estalinista, puede valer. Y como él, y como el lector sabe, una legión de intelectuales desengañados del comunismo, como su propio amigo Koestler, que tenían que rehacer sus vidas en los países capitalistas, inclementes con los intelectuales comunistas pero muy clementes y hasta generosos si colaborabas en esta cruzada de denigrar a la Unión Soviética y al comunismo en general. (4) Notas.- (1) Ignoro si esto proviene de la autobiografía de Regler de 1958, bastante alambicada como consecuencia de su conversión a las virtudes occidentales y donde Regler se explaya un poco en tonterías como que los voluntarios brigadistas estaban bien preparados militarmente por ser veteranos de la Gran Guerra, o que las Brigadas Internacionales salvaron Madrid porque los milicianos españoles siempre salían corriendo. Ambas cosas y otras que no incluimos, son elucubraciones de Regler y de otros internacionales que escribieron sus memorias, afectados también, pese a ser de izquierdas, de un cierto chovinismo internacionalista. Naturalmente voluntarios con instrucción militar había y milicianos huyendo también. (2) A Durruti resulta que se le cae el subfusil al suelo que en aquellos modelos no tenían seguro, golpea con la culata, y una bala se dispara y le atraviesa el pectoral izquierdo. Siempre hay un comunista escondido entre tus balas. La fotografía que se le hizo a Durruti en el hospital demuestra claramente que fue un accidente. (3) El problema de este pacto es que era imposible explicarlo bien, y menos a bregados combatientes antifascistas de las Brigadas Internacionales. Stalin desarrolló una política de alianza con las democracias occidentales para combatir al nazismo. Esta política fue rechazada por Francia y por Inglaterra. La amenaza nazi, no era cosa de broma y el final de la Guerra Civil española fue el detonante de la ira nazi, pues las materias primas que consiguió de Franco a cambio del material de guerra alemán que le permitió ganar la guerra, ya llevaban un año llegando a los puertos alemanes. Tungsteno, magnesio, bismuto, cobre, mercurio, etc... todo lo que la industria bélica alemana necesitaba. Una deuda eterna, por cierto que se terminó de pagar por el Reino de España a la República Federal Alemana, ¡en 1977! Bueno, el caso es que el padrecito Stalin cortó por lo sano y decidió pactar con los nazis para asegurar su supervivencia, y las explicaciones a los comunistas del mundo que las arreglen los propagandistas, que había muchos en nómina. Para Hitler y el Estado Mayor alemán, estupendo, alejaba la sombra del peligro de dos frentes. Y para Stalin, un suspenso por confiar en un tipo que jamás respetó un pacto. El mismo día que Alemania atacó a los rusos en 1941, Stalin no se lo creyó y retardó la defensa rusa innecesariamente. Con lo listo que era para la maldades, Hitler se la coló limpiamente. (4) Las principales victimas de Stalin fueron los comunistas, rusos o de la Comintern. Entre los brigadistas hubo una escabechina demencial y entre los asesores militares en España, otra bien gorda. Muy señalado el caso del periodista Koltsov, un hombre entregado a su causa. Así que los furibundos detractores del estalinismo deberían levantar un monumento al padrecito Stalin. Nadie mató tantos comunistas y durante tanto tiempo. |
Marcel Renaud
Por la izquierda, el teniente coronel Jules Dumont que mandó el batallón Comuna de Paris y luego la XIV B.I. Vital Gayman segundo de Marty y verdadero organizador de la Base de Albacete. A la derecha el comisario político de la XIV B.I. Marcel Renaud.
Fue comisario en la XIV Brigada Internacional durante un tiempo. |
Ludwig Renn (1889-1979) (Arnold Vieth von Golßenau)
En la republica de Weimar, el pacifismo se pagaba caro, pues las fuerzas reaccionarias que andaban con la mentira podrida de la puñalada por la espalda (1) no perdían ocasión de demonizar a todo bicho viviente que no comulgara con sus delirios. De modo que el éxito de su novela "Krieg", trajo consigo algunos problemas de seguridad, como le estaba pasando a todos los intelectuales alemanes progresistas. Nuestro escritor reaccionó con presteza, primero se cambió de nombre, quedándose con nombre del protagonista de su novela, Ludwig Renn, y despues se afilió al Partido Comunista, el combativo pero dogmático KPD. Sus siguientes libros, "Posguerra" y "Viaje a Moscú" tuvieron grande éxito entre los trabajadores alemanes. Tras el incendio del Reichstag y los decretos represivos de Goering que le siguieron, Renn junto con otros intelectuales comunistas fue encarcelado y condenado a 30 meses de cárcel en enero de 1934, de los que cumplió religiosamente 18. Y así liberado en agosto de 1935, se exilió recalando en España unos meses antes de la Guerra Civil. Al estallido de esta se unió al batallón Thaelmann y posteriormente el batallón y el mismo se integró en las Brigadas Internacionales, que pensadas inicialmente como el Ejército de voluntarios de la Kominter, terminaron siendo un cuerpo del Ejército Popular, al que Indalecio Prieto con muy mala leche, equiparó legalmente con la Legión Extranjera. El batallón formó primeramente parte de la XII Brigada Internacional, pero al poco pasó a la XI Brigada, y con él, Renn que ocupó un puesto en el Estado Mayor de la brigada. La XI B.I. lucho en todas las batallas importantes de la Guerra Civil española y dio un tributo de sangre impresionante, tanto es así que reconstruida una y otra vez, al final, en el Ebro, más de la mitad de la tropa eran soldados españoles. Renn pasó a Estado Mayor de la 35 División a la par que la XI se integraba en esta división. Con la derrota pasó a Francia y en 1939 probablemente fue internado en un campo de concentración para extranjeros indeseables, y en 1940, como les pasó a muchos compatriotas, a la firma del Pacto Molotov-Ribbentrop fue liberado por presión de las autoridades alemanas sobre el régimen de Vichy (2) y pudo exiliarse a Méjico, donde trabajó con los exiliados alemanes. Al final de la guerra regreso a Alemania a su destruida ciudad, Dresde, pasando del extinto KPD al Partido Socialista Unificado Alemán (SED) que es como se llamaba en la nueva republica el partido comunista. Ocupó cargos en la universidad Dresde y finalmente pasó a la Humboldt de Berlín. Tubo una carrera artística muy premiada y reconocida. Murió en 1979.
El cineasta Joris Ivens y los escritores Ernest Hemingway y Ludwig Renn en el rodaje de Tierra de España. En algunas publicaciones confunden, en esta imagen, a Renn con el norteamericano Bob Merriman Notas.- (1) La mentira era que los políticos socialdemócratas alemanes habían firmado la paz en la Gran Guerra sin que el Ejército del Kaiser hubiera sido verdaderamente derrotado. Era la mentira más gorda de toda la guerra. Cuando el Estado Mayor, verdadero poder en Alemania durante la Gran Guerra, comprendió tras la ofensiva en el frente del Oeste de 1918 de que no había ninguna posibilidad de ganar la guerra, se quitó de en medio encargando a los políticos y al inoperante parlamento que negociara la paz. Y así, terminado el ruinoso negocio que para Alemania fue la Guerra y su hija la Derrota, la culpa fue del Cha, cha, cha... (2) Acuerdos de intercambio ruso-alemán de presos políticos. Es conocido el caso de Margarete Buber-Neuman, esposa del escritor Heinz Neuman que escribió "Prisionera de Stalin y de Hitler" que por mor de este acuerdo pasó de los campos rusos a los campos nazis, campos de concentración, claro...
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Marius Rietti (1907-1936) El milanés Marius Rietti llegó a España como corresponsal de L'Humanité, pero prefirió combatir, alistándose en la Centuria Tchapaief. Murió en combate el 2 de septiembre de 1936 en Tardienta. Su entierro fue una sentida manifestación de duelo, donde las autoridades catalanas y barcelonesas dieron su pesar a la viuda del periodista italiano, tan joven, tan valiente, tan solidario y tan recién llegado.
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Edwin Rolfe (1909-1954) (Solomon Fishman)
En 1929 se fue a estudiar a Madison, en la Universidad de Wisconsin donde estuve año y medio y publicó algunos poemas. Por motivos que desconocemos dejó la universaidad y volvió a Nueva York donde trabajó en toda clase de oficios hasta que consiguió una plaza en el popular Daily Worker. Esto le dio estabilidad, publicó su primer libro de poemas y se casó. Se iniciaba el año 1936 en el que su vida pegaría un giro trascendente. Con la Guerra Civil española, Rolfe se puso a organizar el reclutamiento de voluntarios americanos para las Brigadas Internacionales y meses después, él mismo se alistó. llegado a Albacete y con su experiencia fue destinado a redactor del Voluntario de la Libertad, el principal órgano escrito de las BB. II. Al parecer sustituyó a Ralph Bates que partió para el frente. En la primavera de 1938, necesitadas las Brigadas Internacionales de refuerzos, Rolfe se unió a las tropas del Batallón Lincoln, concretamente a la primera compañía, con la que combatió en el Ebro. Su mujer, Mary, ya se encontraba en Barcelona ayudando a la causa republicana. Esta situación de pareja en ayuda de la República española fue muy corriente entre los brigadistas. Retirados del frente todos los internacionales por decisión del gobierno Negrín, y tras un tiempo en la frontera, el matrimonio Rolfe consiguió regresar a los Estados Unidos. la recepción fue estupenda con camaradas, familiares y amigos, pero siniestra por parte de las histéricas agencias gubernamentales. (1) Pero el caso fue que en el interregno entre el final de la Guerra Civil española y la entrada de los americanos en la guerra mundial, casi cuatro años, las cosas estuvieron muy feas para los brigadistas y para todo bicho viviente de izquierdas, y no esta el senador de Wisconsin por medio, sino el Comité de Actividades Antiamericanas que desde 1938 venía investigando las actividades de izquierda, además de las actividades para las que fue fundado realmente, el creciente nazi. Los veteranos brigadistas continuaron sus vidas como bien pudieron, con el alivio que supuso la provisional alianza bélica ruso-americana, pero que acabada la guerra, dio todavía más fuerzas al afamado Comité con la intervención del ínclito MacCarthy. Nuestro amigo Rolfe que había trabajado para la agencia TASS en el interregno bélico fue movilizado por el Ejército, aunque no sabemos donde sirvió. Ya licenciado se fue a vivir a Los Ángeles y parece que pudo colaborar en algunos guiones de películas de serie B. Encausado por Macarthy, sobrevivió oponiéndose publica y notoriamente a las actividades del Comité. Rolfe murió de un ataque cardiaco en 1954. Autor de varios libros sobre la guerra civil (City of Anguish; First Live; The Lincoln Bataillon. The Story of the Americans who fought in Spain in the International Brigada). (1) La mayor parte de la gente cree que el anticomunismo visceral americano viene del senador republicano por Wisconsin Joseph McCarthy. En absoluto, el anticomunismo visceral de la derecha americana proviene de los años de la Guerra Civil rusa, cuando tropas americanas ocuparon distintas ciudades costeras rusas, como Arkangel y el propio Vladivostok al alimón con los japoneses. El papel de estas tropas fue menor y hubieron de regresar ante las terribles condiciones climáticas y humanas de la Guerra Civil rusa. Fue la única vez en que tropas americanas y rusas se enfrentaron en pequeñas escaramuzas terrestres. Ganaron los rusos. |
Walter Roman (1913-1983) (Ernst Neuländer)
Estudio ingeniería en la celebre ciudad industrial de Brno en Checoslovaquia donde se fabricaban todas las armas de centroeuropa. Estaba afiliado al Partido Comunista Rumano, pero también al húngaro, y al Checoslovaco, amen de trabajar en el francés y en el español. Durante el principio de los años treinta su trabajo se enfocó como periodista de los grupos de agitación y propaganda del Partido Comunista rumano. Al estallido de la Guerra Civil española se alistó en las Brigadas Internacionales con un nutrido grupo de compatriotas rumanos. Roman sirvió en el II Grupo Skoda, en la batería Anna Pauker, conocida dirigente comunista rumana. Al parecer se inscribió con el nombre de Walter o Valter Roman. Intervino en todas las batallas de la Guerra Civil hasta que fue retirado por heridas de combate a Rusia. Tuvo destacada actuación Brunete. En Rusia trabajo de técnico en una fabrica de aviones y posteriormente en un centro de investigación, compaginando estas actividades con su trabajo en la radio en lengua rumana de la Comintern. Se casó con una española, Hortensia Vallejo, una santanderina que se fue a Rusia al caer la ciudad, y que sería locutora de Radio España Independiente. Roman volvió a Rumania con la derrota nazi. Había sido comisario político de la División rumana del Ejército rojo, llamada Crisan Horia, que se formó con prisioneros rumanos en manos soviéticas y cuyos cuadros eran todos comunistas bajo el mando del general Mihail Lascar, que prendido en Stalingrado decidió pasarse en cuerpo y alma a los rusos. Por ello al llegar a Rumania fue ascendido a general del nuevo ejército nacional rumano. En esa línea Walter Roman trabajó durante años en aspectos científico-técnicos, educativos y propagandísticos del ejército y de la universidad. Fue también Ministro de Telecomunicaciones. A principios de los cincuenta se produjo una crisis ideológica en las cúpulas dirigentes del Partido Comunista, que afectó a muchos ex brigadistas ex miembros de la resistencia francesa, entre ellos Walter Roman. Fue perdiendo sus cargos y su relevancia. Tuvo que soportar duros interrogatorios y malos tratos de todo tipo, quedando relegado al ostracismo y expulsado del ejército. La muerte de Stalin alivió su situación y aunque fue rehabilitado, no le quedó otra que asumir la política oficial en cuestiones tan importantes como la invasión de Hungría. Tuvo también un enfrentamiento con su antigua valedora y grande figura del comunismo rumano, Anna Pauker, cabeza visible del estalinismo rumano. La muerte de su mentor Gheorhiu-Dej y la llegada de Nicalae Ceausescu le animaron a seguir en activo, condenando la invasión de Praga en el 68. Pero tampoco encontró refugio con Ceausescu cuyo régimen le resultaba insoportable pese a que tenía altos cargos. La degeneración de los sistemas comunistas en regímenes personales tiránicos sustentados en retórica socialista le hizo dudar de todas sus convicciones. Además, el pasado siempre sale al encuentro, y Roman había participado de una forma o de otra en la represión del movimiento anti-soviético en Hungría y tenía antecedentes por apoyar una cierta independencia en Transilvania. Murió en 1983 siendo miembro el Comité Central del Partido, colaborador del diario Scinteia y director de la Editorial Política Rumana. Un hijo suyo Petre Roman fue presidente provisional de Rumania a la caída de Ceaucescu. En España, Petre Roman fue entrevistado en varias ocasiones debido a que siendo hijo de española y santanderino de adopción, hablaba perfectamente español. |
Esmond Romilly (1918-1941)
De vuelta a Inglaterra, no pudo soportar el ambiente y se marchó a los Estados Unidos. Al inicio de la Guerra Mundial se alistó en la Real Fuerza Aérea Canadiense y tras ser rechazado en una primera instancia consiguió la instrucción para formar parte de la tripulación de un bombardeo. Destinado en Inglaterra su avión fue derribado y murió en la acción en 1941.
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James Rutherford.
[http://www.international-brigades.org.uk/british_volunteers/jarama_pows.htm ]. Algunos de los miembros de este grupo recibieron una muerte instantánea de manos de sus captores, fascistas italianos, otros fueron llevados a prisión y condenados a muerte, entre ellos Jimmy Rutherford, que permaneció cinco meses en diversas prisiones franquistas, condenado a trabajos forzados a la espera de que fuera ejecutada su pena de muerte. Sin embargo, tras la derrota de las tropas de Mussolini en Guadalajara existirá la posibilidad de intercambiar los nuevos prisioneros fascistas italianos por internacionales republicanos. Jimmy Rutherford será intercambiado y devuelto a Gran Bretaña por sus carceleros franquistas. De nuevo en Gran Bretaña, Jimmy Rutherford tiene ocasión de participar en el IX conferencia de la YCL de Edimburgo, congreso del que saldría elegido delegado gracias a los votos de sus compañeros, inspirados con su ejemplo en la lucha antifascista. Sería esta conciencia de lucha y compromiso la que le llevaría a volver a España. En principio se dedicaría a ir por los hospitales para animar a los heridos y dar alguna charla sobre la situación en la guerra e internacional, pero su deseo de volver al frente le hace alistarse en la escuela militar republicana donde tras dos meses llegaría a ser teniente, colaborando en las labores de instrucción de nuevos combatientes. Sin embargo su deseo de volver al frente le llevan a protestar y solicitar reintegrarse de nuevo en el Batallón Británico de las Brigadas Internacionales y continuar así la lucha antifascista y la defensa de la República Española en primera línea. Desgraciadamente Jimmy sería hecho de nuevo prisionero en la localidad de Calaceite, el frente de Aragón, en marzo de 1938. Para colmo de males sería reconocido por el interprete en los interrogatorios de los fascistas, el entonces embajador británico en España Alfonso Merry del Val, que ya le conocía de haberle interrogado cuando fue capturado en el Jarama. Por ello sería fusilado sin más dilación en la prisión de Zaragoza a donde había sido conducido.
Fuente: Antonio Díez Nota: La imagen ha sido tomada en el museo: http://www.cac.org.uk/venues/peoples_story.htm |
Frank Ryan (1902-1944)
En España era el líder natural del grupo de brigadistas irlandeses por su carisma y durante la Guerra, aparte de combatir en el frente, se sumó a otras tareas de organización entre las que destaca la publicación del "Libro de la XV Brigada", editado por el Comisariado General de las Brigadas Internacionales en una edición única que combinaba las diversas lenguas que se hablaban en la XV Brigada y que apareció finalmente publicada en febrero de 1938. Tras ayudar a la edición de este libro retornó al frente el 30 de marzo, pero al día siguiente fue capturado por tropas italianas en una emboscada durante el tiempo de las retiradas a lo largo del Ebro a la que se vio obligado el Batallón Británico en aquel momento. Fue enviado al tristemente famoso campo de concentración franquista de San Pedro de Cardeña y condenado a muerte. Debido a las presiones extranjeras se le conmutó la pena, pero era sometido a constantes palizas, vejaciones y torturas para tratar de minar su moral. Aun así los presos que compartieron cautiverio con él cuentan como nunca se amilanó y que siempre se mantuvo firme en detalles como, por ejemplo, negarse a efectuar el saludo fascista, hecho por lo que era repetidamente golpeado hasta quedar inconsciente. Frank Ryan fue finalmente entregado por los carceleros franquistas en 1940 a la GESTAPO nazi y trasladado a una prisión en Alemania. Las presiones internacionales aumentaron y los trabajos del “Comite por la liberación de Frank Ryan” estuvieron activos durante toda la Segunda Guerra Mundial. Incluso en algún momento se llegó a pensar que la liberación de Frank Ryan era inminente, especialmente al comenzar el declive del ejército nazi y sucederse las derrotas del mismo. Finalmente no fue así y fruto de las palizas y la continua tortura física y psicológica murió en 1944 en el sanatorio de Dresde donde estaba internado. En 1979 y por petición popular, los restos de Frank Ryan se trasladarían al cementerio de Glasnevis, en Dublín, donde hoy reposan. * Existe un libro dedicado a la figura de Frank Ryan titulado: Cronin, Seán, “Frank Ryan: The Search for the Republic”, Dublin: Repsol, 1979. * …Así como una canción dedicada a los brigadistas irlandeses, compuesta por el cantautor irlandés Christy Moore. La partitura y la letra están en este link: http://sniff.numachi.com/~rickheit/dtrad/pages/tiQUNTBRG2;ttQUNTBRG2.html * Mas links sobre Frank Ryan: http://www.spartacus.schoolnet.co.uk/SPryan.htm http://www.searcs-web.com/ryan2.html http://www.rte.ie/culture/millennia/people/ryanfrank.html http://www.findagrave.com/cgi-bin/fg.cgi?page=gr&GRid=5747050&pt=Frank%20Ryan Fuente: Antonio Diez |
Marcel Sagnier (1909-1962)
Sagnier que había sido herido varias veces regresó a su pueblo como un héroe de las Brigadas Internacionales a finales de 1938. En 1940 fue detenido y enviado a Alemania como trabajador esclavo. De regreso a Francia las cosas habían cambiado y Sagnier no se encontró a gusto con sus antiguos camaradas y abandonó la militancia. Mantuvo amistad y contacto con su camarada André Marty. Murió en 1962.
A la izquierda, el arquitecto y héroe de la resistencia francesa, Boris Guimpel que tuvo varios mandos en la XIV B.I., y a la derecha el forzudo y voluntario Marcel Sagnier que llegó a mandar la XIV |
Schamma
Voluntario inglés. Trabajaba en la Comisaría Política de las BB. II. y en Altavoz del frente |
Richard Schenk
Voluntario alemán que fue comisario político en la XI B.I. |
Hugh Slater (1906-1958)
Durante la Segunda Guerra mundial, colaboró con su camarada de las BB. II. Tom Wintringham, en la formación de la Home Guard, fuerza paramilitar entrenada como contraguerrillera por Wintringham y que al poco tiempo fue integrada en el Ejército Inglés y su escuela disuelta y sus mandos licenciados, por el peligro que el mando inglés veía en sus lideres comunistas. Slater fue reclutado para la DCA (Antiaéreos). Publicó un libro de homenaje a Ralph Fox, intelectual inglés muerto en Lopera (Ralph Fox, a Writer in Arms). Su novela, The Heretics, es considerada como una de las mejores de lengua inglesa sobre la guerra española. También escribió otras novelas con gran éxito alguna de las cuales fue llevada al cine. Murió en 1958 |
Richard Staimer (1907-1982) (a veces Staimler)
En 1938 partió para Moscú lo que solía ser fatal para muchos de los mandos de las BB. II., pero Staimer sólo perfeccionó estudios regresando a España. Los franceses lo metieron en un campo al final de la guerra. Salió, quizá por los acuerdos de repatriaciones mutuas del acuerdo Molotov-Ribbentrop, y partió para Rusia. Durante la Gran Guerra Patria colaboró con la oficina para prisioneros alemanes. Al fin de la guerra fue nombrado jefe de policía en distintas ciudades de la RDA. Alcanzó el grado e Inspector General hasta su jubilación. (1) La propaganda anticomunista, el escritor Ludwig Renn, por ejemplo y otros ex comunistas que necesitaban con urgencia aceptación occidental acusaron a Staimer del asesinato de Hans Beimler, y también su compañera, Antonia Stern, acusó a la RGU soviética de este asesinato. Staimer era un comunista duro y disciplinado que llegó a general de policía de la RDA. Pero no tenía sentido acabar con Beimler, que se encontraba en proceso de disidencia tras tener noticias de los procesos de Moscu, precisamente en una trinchera del peligroso frente de Madrid, donde el enemigo te los liquidaba gratis en unas semanas. Yo personalmente creo que a Beimler lo mató un tirador rebelde cuando realizaba una inspección en primera línea, de la que hay testigos. Y también creo que Beimler hubiera tenido problemas tarde o temprano con sus camaradas comunistas más pro soviéticos. |
Marion Stone (Frances M. Merriman) (- 1991)
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Emilio Suardi
Fue comisario de la XII B. I. |
Suckanek
Polaco. Comisario XIII Brigada Internacional. |
Karl Swierczewski (general Walter) (1896-1947)
El general Walter disparando un obús en Belchite Este polaco nacido bajo el dominio zarista de Polonia en una familia trabajadora y fue obrero metalúrgico desde su adolescencia. Durante la Gran Guerra, su familia fue evacuada a Rusia ante el avance alemán. Convertido en revolucionario, Swierczewski, se unió al Ejercito Rojo con el que combatió durante la Guerra Civil rusa. Cuando los polacos apoyaron a los Blancos, el Ejercito rojo inició una ofensiva contra Varsovia en la que participo Swierczewski en el lado soviético. La ofensiva fue detenida por los polacos y el frente se estabilizó. Swierczewski resulto herido. Fue encargado luego de dar cursos de marxismo para extranjeros en la escuela Lenin y se graduó también como comandante en la Escuela militar Frunze para extranjeros. Alumno aplicado, fue destinado al Estado Mayor rojo, la famosa STAVKA, ascendiendo a coronel por sus méritos de buen hacer. Recibió la Orden de la bandera Roja. Como militar de la Comintern fue enviado a Paris para la organización de las Brigadas Internacionales. Nombre de guerra, "general Walter". A finales de octubre ya se encontraba en Albacete y le fue encargado el mando de la XIV Brigada Internacional. Unidad que entró en acción en Lopera, donde el batallón La Marsellaise y su compañía británica fueron diezmados, aunque se consiguió detener la ofensiva franquista. El mando confiaba en Walter y en su unidad y la brigada participó en todas las batallas alrededor de Madrid, la Carretera de La Coruña, y el Jarama, donde Walter recibió el mando de la división de su nombre, futura 35 División Internacional. Dumont se hizo cargo de la XIV B.I. En mayo, Walter con la 35 división participó en la ofensiva de Segovia con escasos resultados por la superioridad aérea rebelde, la férrea resistencia, el propio general franquista Varela tomó el mando del sector, y la falta de adecuación de las tropas republicanas que arrastraban todavía muchos defectos de las milicias y, como no, de la falta de perspectiva del Mando del Ejército del Centro, Miaja y Rojo, que obligados políticamente a emprender esta ofensiva, se plantearon objetivos muy difíciles para la calidad ofensiva de las fuerzas. La XIV Brigada no tuvo una actuación muy destacada pues llegó desfondada al frente tras una larga marcha que resultó totalmente inadecuada para entrar en batalla. Durante la ofensiva de Huesca hubo una concentración de generales de la Comintern. El general Lucaks murió cuando arengaba a sus tropas desde su descapotable. Le relevó el general Kleber y finalmente el general Walter fue enviado al escenario al final de la batalla, donde es conocido su informe sobre la XII Brigada Internacional afirmando que su actuación no había sido tan brillante como en el frente de Madrid. En Belchite la 35 División participa en la toma de esta ciudad con una magnífica actuación. También en Teruel la 35 división se batió el cobre y en las retiradas de la primavera de 1938, la división estuvo a punto de ser destruida y su comandante casi cae prisionero. Durante la II Guerra Mundial combatió a los nazis en los ejércitos soviético y polaco. En la nueva Polonia fue Ministro de Defensa. Durante una visita a una zona inestable del país, fue asesinado por un grupo de guerrilleros anticomunistas ucranianos. Existe un archivo fotográfico en Albacete de este general de la República.
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Szalway (o Azalvay) (Tschapaiew)
Húngaro. Fue Comandante de la XIII Brigada Internacional. |
Mieczyslaw Szleyen (1905-1955) Mieczyslaw Szleyen fue un periodista, científico e intelectual polaco que militó en el partido Comunista Polaco y sirvió en las Brigadas Internacionales. Mieczyslaw tenía una gran formación universitaria y un doctorado en Filosofía por la universidad de Cracovia, que es donde conoció a Sofía activista e intelectual como él, con la que se caso. Al terminar sus estudio se unió al Partido Comunista Polaco, y en Lodz, donde se instalaron creó la revista económica "Kronika" que llamó poderosamente la atención de las autoridades polacas, que procedieron a su cierre y detención de Mieczyslaw al que condenaron a tres años. Pudiendo librarse de la cárcel al optar por la deportación, en este caso a Checoslovaquia, que era un país con libertades formales por contra de la católica y autoritaria Polonia de la dictadura del general Józef Piłsudski y a su fallecimiento la de sus sucesores también militares. En estas actividades destacó especialmente Sofía, su mujer. Szleyen decidió unirse a las Brigadas Internacionales y partió en 1937 para España donde se reuniría con su mujer. Allí se incorporó a la XII brigada Internacional donde servían los voluntarios polacos en el batallón "Dabrowski". Como tenía experiencia periodística y editora puso en marcha la prensa de la unidad "Dąbrowszczak" y "Ochotnik Wolności". Se dice que el alma de esta empresa corresponde a Sofía, que se convertiría en una gran hispanista polaca y que fue la artífice del mito Dabrowszczakow. (1) Al termino de la guerra civil estuvo detenido en campos franceses del sur de Francia y de la Argelia francesa. A la llegada de los aliados al norte de África partió para Rusia en 1943 mientras su mujer, Zofia, que no había sido deportada continuaba en Francia en apoyo de la resistencia. En Rusia se unió al embrión del Ejército Popular Polaco, en su Primera División de Infantería, recorriendo la larga trocha victoriosa del Ejército Rojo desde Stalingrado a Berlín. Afincado en la Polonia Popular, recibió la Orden de Primera Clase de la bandera del Trabajo, también escribió un extenso artículo sobre las Brigadas Internacionales y especialmente los voluntarios polacos en la Guerra Civil española. Murió en 1955. (1) Sobre los brigadistas polacos debemos aclarar un par de puntos importantes para entender su actuación en las BB. II. Más de 4.000 voluntarios fueron calificados como polacos, pero de Polonia concretamente debieron llegar unos 600, el resto eran voluntarios de la emigración, sobre todo francesa. Fueron distribuidos en varias unidades, el bon, Dabrowski", la compañía "Mickiewicz", el bon Palafox mixto de españoles y polacos, y otros muchas unidades con secciones de origen polaco. Sobre el bon. Palafox, el héroe español defensor de Zaragoza, corren muchas leyendas. La realidad es que fue creado solo por una razón, reivindicar la reconciliación hispano polaca, dado que las tropas francesas que sitiaban por segunda vez Zaragoza en nuestra guerra de la Independencia, incluían fieros batallones de polacos que fueron determinantes en el sitio. Estos batallones, incluida la caballería polaca que desalojo a las tropas españolas de Somosierra al mando del propio emperador, que mimaba estas tropas. Estos batallones, digo, al fin del sitio rindieron honores de corazón a las exhaustas tropas de Palafox cuando el consejo ciudadano, que no Palafox, optó por la rendición. Y siguiendo con el hilo, las relaciones en estos batallones mixtos de las BB.II., dicen, fuero difíciles. Los reclutas españoles que llenaban las bajas de los brigadistas no estaban muy contentos, para empezar eran reclutas de reemplazo, no voluntarios, luego, la unidad era de choque donde se muere abundantemente, además no se entendían ni papa con los polacos y estos les miraban con superioridad partiendo de la extendida idea de todas las nacionalidades de las Brigadas Internacionales de que los españoles eran unos inútiles para la guerra convencional y que en general siempre salían corriendo, y eran ellos los brigadistas los que realmente defendían la República. Esta majadería tenía un argumento muy sólido, la lista de bajas. Los Estados Mayores del Ejército Popular siempre usaban en sus ofensivas el mismo núcleo de tropas, tanto españolas como internacionales. Estas brigadas de choque eran reconstruidas una y otra vez con un efecto moral de injusto sacrificio. Sólo la disciplina de la conciencia como dice Mirta Nuñez y la labor de los comisarios permitía a estas unidades, en puridad brigadas ligeras que no completaban la dotación nunca, si escasamente llegaban a los 2.000 hombres, permitían, digo, volver a reconstruir la moral de la unidad. Y esto pasó en las primeras importantes batallas de Madrid (reacuérdese las brigadas de Lister deshechas en el cerro Garabitas), en Brunete, en Belchite un poco menos, en las retiradas de marzo del 38, en el Ebro, etc... las Brigadas Internacionales y el V Cuerpo pagaron un altísimo precio de sangre. |
Henry Tanguy (Rol-Tanguy) (1908-2002)
Al fin de la Guerra Civil española regresó a Francia y fue movilizado. Tras la derrota y para evitar ser envido a Alemania, pasó a la clandestinidad uniéndose a las FTP (Franco tiradores y partisanos) y pronto fue uno de los principales dirigentes de la Resistencia en la región de Paris. Fu entonces cuando usó el sobrenombre de Coronel Rol en homenaje a su compañero de las Brigadas Internacionales. Su papel fue determinante en la liberación de Paris al unísono con las fuerzas de Leclerc, recibiendo de manos del comandante alemán von Choltitz la rendición de las fuerzas de la guarnición alemana. En esas fechas cambió su apellido de Tanguy a Rol-Tanguy continuando como militar en el Ejército Francés y combatiendo con el Primer Ejército. Alcanzó el grado de Coronel. Y en eso estaba cuando la Guerra Fría le obligó a dejar la milicia por ser comunista pese a todas las condecoraciones y a la consideración de héroe de Francia. Por contra fue admitido en el Comité central del PCF. Tanguy pronunció el elogio de Boris Guimpel, brigadista francés y amigo suyo cuando murió en abril de 1979. Henri Tanguy murió en 2002 con 96 años. Sus meritos le fueron reconocidos en distintas ceremonias. |
Paolo Tedeschi
Voluntario italiano ayudante de Luigi Longo en la Comisaria Política de las BB. II. |
Walter Tapsell (1904-1938)
Brunete cambió al Bristish batallón, El Jarama ya había dado una pista, pero este pueblo madrileño confirmaba lo que ya todos sabían, que se los lanzaba al combate como si fueran la guardia napoleónica y sólo eran ciudadanos enrolados en un ejército mal armado y peor instruido, con mandos sin experiencia y donde se aprendía a luchar a base de muertos. Eso abocaba a situaciones imposibles y potencialmente suicidas. Y desmoralizaba al más pintado. Como decimos, se sabe que Tapsell se quejó amargamente de su jefe divisionario con palabras muy despectivas que han pasado de brigadista en brigadista, por lo que probablemente fueron ciertas. La frasecita, aunque expresaba una realidad, era absolutamente desleal con su jefe de división, y repartía culpas en una sola dirección. Lo que vino a decir era que Galicz era un inútil que no sabría mandar ni una tropa de chicas Boy Scout (las famosas brownies de las galletitas) y mucho menos un Ejercito Popular. Brunete fue un matadero para el Ejército Popular y especialmente para las Brigadas Internacionales. Muchos de los mejores hombres de la XV Brigada cayeron en esa batalla (3). Señalaremos al valiente George Nathan que mandó el batallón Spanish y murió en un bombardeo, Oliver Law, líder sindicalista americano, que fue el primer comandante negro de una unidad militar compuesta de americanos y que en Brunete mandaba el Lincoln, Julian Bell reconocido intelectual y poeta y otros muchos... La pequeña tempestad que cayó sobre el Partido Comunista Británico tras la batalla de Brunete se resolvió enviando a Inglaterra a Tapsell, Aitken (que se llevaba regular con Tapsell), a Copeman, Cunningham y al comisario Bert Willians. La dirección del partido dio verosimilitud a Tapsell y Copeman que volvieron a España, mientras que los otros quedaron en Inglaterra. Tapsell como comisario del batallón y Copeman como comandante. Se dice que Copeman le dijo a Tapsell, que a él no le iba a hacer lo que le hizo a Galicz. Al parecer Tapsell estuvo de acuerdo. Las cosas no cambiaron mucho para el batallón británico, pero mejoraron, y eso marcó la diferencia. Aunque los recién llegados que cubrían bajas no tenían la calidad ideológica que sus antecesores, y la República iba perdiendo, el batallón británico tuvo buenas actuaciones tanto en Belchite como en Teruel dentro de la XV brigada que ya se la denominaba por extensión, Brigada Lincoln. La llegada de nuevos líderes a la XV brigada, el americano Robert H. Merriman como jefe del Estado Mayor y Stev Jobs, americano también, como comisario, más la realidad político militar de la II República que rechazaba las ofensivas del Ministro de Defensa nacional, Indalecio Prieto para probar a ver qué pasa, en palabras del general Modesto, dieron un respiro a la lista de bajas. Pero en marzo de 1938 el ejército franquista inició su ofensiva de primavera, y el Ejército del Este tras las graves perdidas y desabastecimiento de las unidades participantes en Belchite y Teruel, resistió casi un mes retardando el avance y sacrificando tropas para salvar el grueso de la fuerza ante la inminente partida en dos de la zona republicana. El 9 de marzo el British se encontraba en primera línea en el sector de Belchite y recibió el impacto de la ofensiva enemiga. La brigada recibió órdenes de retrasar todo lo que pudiera la acometida rebelde. La brigada se fue replegándose hacia Caspe en el interior del territorio republicano con arriesgados repliegues con el enemigo pisándole los talones, y durísimos contraataques que dejaban a las unidades exhaustas. A finales de mes, el batallón trataba de reorganizarse en Corbera y recibió órdenes de defender Calaceite, haciéndose fuertes tras duros combates en la ermita de San José cruce de caminos entre Maella y Mazaleón. El batallón aguantó hasta que emprendió la retirada, una dramática retirada en la que entre muertos, heridos y prisioneros, se perdieron 300 hombres. Las tropas italianas del CTV condujeron a los prisioneros británicos, quizá medio centenar, a Calaceite. Era el 30 de marzo. Ese mismo día, la Fuerza Aérea republicana, avisada de una gran concentración de tropas rebeldes en la plaza del pueblo, bombardeó el lugar con gran éxito provocando una gran mortandad entre las tropas italianas. En venganza, un pelotón de tropas acantonadas en el pueblo fusilaron a todos los prisioneros en un lugar denominado "balsa podrida". Entre estos se encontraba probablemente Walter Tapsell. De esta muerte se han dicho muchas tonterías, como siempre, siniestros agentes comunistas asesinaron al competente Tapsell. Otra más... Los estudios modernos sobre el batallón británico (4), gloría del antifascismo inglés, han dejado claro que el control supuestamente estalinista sobre la unidad era poco significativo, como en toda la XV Brigada Internacional. Los lideres como Walter Tapsell, Aitken, Copeman, Nathan, Wintringham y otros, actuaron con suficiente libertad y democracia. Esta idea del malvado estalisnimo socavando la valentía británica caló mucho a partir de las críticas de Orwell a la unidad. Unidad donde por cierto le hubiera encantado servir, y donde con toda certeza Orwell hubiera tenido una mirada distinta de la Guerra Civil, si es que hubiera sobrevivido.
Notas.- (1) Lo mismo había pasado en la XIII B.I., donde hubo motines por estas causas de señalada incompetencia militar de mandos puestos por motivos políticos y no militares que no supieron estar a la altura. Cosa nada fácil pues eran civiles sin experiencia militar que tenían que manejar a sus casi dos mil hombres ante un ataque brutal de la aviación franquista, su endiablada artillería y su tropa de choque profesional de moros y legionarios que atacaban ululando y ponían de los nervios a cualquiera que no tuviera experiencia militar y no supiera que los gritos se dispersan con ametralladoras y bombas de mano en posiciones bien protegidas y ubicadas, y esperando fríamente a tenerlos a tiro. (2) La cuestión es que los voluntarios habían llegado a España llenos de entusiasmo antifascista, y que además de entusiasmo se habían encontrado una cruda realidad militar, un matadero que en muchos aspectos era inevitable, y nada exclusivo de España, sino que se sustentaba en civiles con poca a ninguna experiencia militar, mal armados, mal instruidos, mal integrados y peor dirigidos. Esto le pasó factura a todos los ejércitos de la historia que se organizaron con civiles apresuradamente armados y encuadrados. Nordistas en USA, chinos contra japoneses, rojos contra blancos en Finlandia y en Rusia, etc... (3) Sólo la división de Lister, la 11, perdió más de 300 oficiales y comisarios en Brunete. (4) Richard Baxel - El batallón británico de la XV Brigada Internacional. |
Maciej Techniczek
Fue Comisario en la XIV Brigada Internacional. |
John Tisa (1914-1991)
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Torunczyk
Polaco. Fue Comandante de la XIII Brigada Internacional. Al final de la guerra, mandó durante unos días y dio su nombre a una agrupación de voluntarios que se encontraban en la frontera francesa por su condición de apátridas. |
Ettore Vanni
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Sandor Voros
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Francois Vittori
Voluntario francés que fue comisario en la XIV B.I. |
Giuseppe Di Víttorio (Mario Nicoletti) (1892-1957)
La llegada de la Guerra Civil española, animó su vida política trasladándose a España en apoyo de Andre Marty para la organización de las Brigadas Internacionales, especialmente en el incipiente Batallón Garibaldi que inicialmente se fue constituyendo con distintos grupos de combatientes italianos tanto en el frente de Aragón como en el de Madrid. En Albacete trabajo con el alias de "Mario Nicoletti". Salió de Albacete como comisario político de la XI Brigada Internacional rumbo al frente de Madrid con importante acción de esa brigada en la defensa de la capital. Con las subsiguientes reorganizaciones de los batallones internacionales, los Garibaldis pasaron a la XII Brigada Internacional y Di Vittorio con ellos. Terminada su misión en España pasó a Francia y al estallido de la guerra mundial fue arrestado por la GESTAPO y entregado a los italianos que lo metieron en un Presidio. En 1943 con la caída del gobierno de Mussolini se comprometió con la vigorosa resistencia italiana del Norte donde se había instaurado la República Social Italiana con Mussolini al frente. En 1945 abogó por un pacto trasversal que permitiera soluciones políticas a la naciente República italiana. En 1949 fue nombrado presidente de la Federación Sindical Mundial. |
Veljko Vlahovic
Voluntario que trabajó en la propaganda radiofónica. |
Sam Wild
Tras pasar por la base de Madrigueras entraría por primera vez en combate el 12 de febrero de 1937 en la famosa Batalla del Jarama, liderando un grupo de hombres que permanecieron en el alto del Pingarrón cubriendo la retirada de otros compañeros durante el primer día de batalla. Sam permaneció en posición a pesar de las cuatro balas que le habían alcanzado, dos en la pierna y dos en el lado izquierdo, y del fortísimo empuje del ejército fascista. Fue trasladado al hospital de Elda, Alicante, donde estuvo ingresado hasta el 7 de mayo, fecha en la que retornaría al Frente del Jarama, bastante más calmado por entonces. La siguiente acción en la que participaría fue la Batalla de Brunete, durante el mes de julio de 1937. Sam estuvo a cargo de un grupo de infantería compuesto por unos noventa hombres. Sam Wild sería herido en el muslo izquierdo durante el asalto al Cerro del Mosquito, en las afueras de Boadilla del Monte, y enviado de nuevo al hospital en Alicante, en esta ocasión el de Denia, donde permaneció un mes. Fue nombrado teniente a su retorno al Batallón Británico y ascendido a comandante de compañía el 20 de agosto de 1937. Sam Wild volvió de permiso a Inglaterra del 29 de septiembre al 15 de noviembre de 1937 para recolectar ayuda para la República Española y participar en actos de apoyo a las Brigadas Internacionales. A su vuelta a España comandaría la tercera compañía del Batallón Británico durante la Batalla de Teruel en enero de 1938. Cuando Bill Alexander resulta herido, Sam sería nombrado Comandante del Batallón Británico, posición de mando que ejerció desde los primeros meses de 1938 hasta el final de la guerra, excepto algún intervalo de visitas al hospital. Sería ascendido a capitán el 29 de marzo. Durante esos meses el Batallón Británico se vio obligado a retirarse a lo largo del río Ebro debido al fortísimo ataque lanzado por las tropas franquistas que arrancaría en Zaragoza y que acabaría llegando al Mediterráneo y cortando la República en dos. Mientras se produce esta retirada, Sam Wild junto con otros brigadistas estuvo a punto de ser hecho prisionero por soldados italianos, aunque en un momento de confusión se lían a puñetazos con sus captores y logran escapar. El 25 de julio de 1938 comenzaba la Batalla del Ebro, la ultima acción en la que participarían las Brigadas Internacionales. Durante la misma el Batallón Británico, comandado por Sam Wild, participaría en el ataque a la cota 481 en las cercanías de Gandesa y la 666 en la sierra de Pándols. Sam recibiría la Medalla al Valor de la República Española ya que, aunque fue herido en la mano derecha, renunció a abandonar el frente. Finalmente es enviado al hospital en Barcelona, por lo que se perdería la última acción en la Guerra Civil Española del Batallón Británico durante el mes de septiembre de 1938, momento en las que Negrín decide retirar a todos los internacionales. Se reincorporaría al Batallón mientras estos esperaban a ser repatriados siendo Sam Wild, a su llegada a la estación de Victoria en Londres, el encargado de ordenar romper filas por última vez a los brigadistas británicos con un emotivo discurso en el que mantendría la promesa de luchar por el pueblo español “en otro frente y con otras armas”.
Fuente: Antonio Diez La imagen esta tomada de la web: http://www.spartacus.schoolnet.co.uk/SPwildS.htm |
Tom Wíntringham
Fuente: Antonio Diez |
Eva de Wiska
Enfermera de origen Búlgaro del Servicio Sanitario Internacional ayudante del Dr. Bansky |
Milton Wolff (1915-2008)
A principios de 1937, Wolff marchó para España con la intención de servir de camillero en los Servicios Sanitarios Internacionales. pero una vez en Albacete y viendo el ambiente de los voluntarios americanos y conociendo lo sucedido en el cerro Pingarron (1) decidió alistarse como miembro de la compañía de ametralladoras. Wolff fue un autentico superviviente, como miembro del batallón Lincoln estuvo en todas salvo en el Jarama. Y sobrevivió. Salió indemne de Brunete que ya fue difícil, de Belchite y de Teruel. Había ascendido a capitán por sus méritos, y eso no era ninguna ganga en las BB. II. los primeros en caer eran los mandos de las compañías de fusileros. En las retiradas de marzo, la epopeya de Wolff fue memorable. Su grupo quedó atrapado tras las líneas rebeldes. Los republicanos habían volado los puentes del Ebro y Wolff estaba ya sólo rodeado de enemigos. Durante un tiempo se escondió y se alimentaba de la ayuda de los campesinos que se apiadaban de su situación. Se decidió a cruzar el Ebro a nado. Una gesta muy peligrosa, era primavera, el Ebro bajaba crecido, con fuerte corriente y con remolinos. Pero Wolff, al que un periodista español había comparado con Tarzan en un reportaje sobre las BB. II., lo cruzó felizmente y se reunió con sus compañeros supervivientes que lo recibieron como a un héroe. Merriman estaba desaparecido y Dave Doran muerto. El mando de las Brigadas decidió ascenderlo a mayor y nombrarle comandante del batallón Lincoln. Y como tal participó en la batalla del Ebro con la XV brigada internacional. Una brigada donde más de la mitad de sus componentes eran españoles. La actuación defensiva de la XV brigada en la Sierra de Pandols fue heroica. En noviembre de 1938 los voluntarios fueron retirados por decisión del gobierno republicano. Wolff encabezó la marcha de los voluntarios internacionales licenciados y dio con lágrimas en los ojos las últimas ordenes de rompan filas al batallón. Los voluntarios americanos tuvieron relativa suerte, pues por contra de muchos voluntarios centroeuropeos, pudieron regresar a su país. Al inició de la Guerra Mundial, Wolff se trasladó a Inglaterra para participar en la lucha contra el nazismo ofreciéndose a la Inteligencia Militar británica para organizar y ayudar a la incipiente resistencia antinazi europea. En 1942, Wolff se alisto en la infantería de la US Army y fue destinado a Burma donde entró en combate en 1943. Al año siguiente, la Oficina de Servicios Estratégicos (OSS) le llamó a Italia para relacionarse de tu a tu con los partisanos italianos donde predominaban los comunistas. Tras la guerra, Wolff no se libró del senador por Wisconsin ni del Comité de Actividades Antiamericanas del Congreso y fue llamado a declarar. Que fueron antológicas: " Soy judío y como tales fuimos las primeros en sufrir el fascismo (nazismo) y por ello me fui a España a combatirlo". Wolff continuó su vida y su lucha por los derechos civiles. Escribió sus experiencias como soldado en dos guerras en "Another hill". Murió en 2008 (1) Probablemente de boca de Merriman, a la sazón oficiando de instructor de los recién llegados voluntarios americanos, y por cierto ya sin la aparatosa escayola que le pusieron en el torso para reparar su rotura de los huesos del hombro. |
Wilhelm Zaisser (1893-1958)
Al estallido de la Guerra Civil española fue enviado a España y ingresó en el 5º Regimiento como asesor. Con las creación de las Brigadas Internacionales marchó a Albacete donde tras la creación de la XIII Brigada Internacional se le dio el mando en diciembre de 1936 con rango de general (general Gómez). La brigada partió para Teruel donde participó en la primera batalla de esta ciudad con algunos éxitos iniciales. Tras un breve periodo de reorganización donde se le unió un batallón español, partió para Málaga para detener y en lo posible estabilizar la línea del frente tras la ofensiva de Queipo. Partió luego para Sierra Nevada donde también contuvo una ofensiva rebelde en la zona. A inicio de abril de 1937 la brigada fue enviada al frente de Peñarroya y participó en la ofensiva con algunos éxitos locales. De regreso a Albacete, la XIII fue reorganizada y sus mandos fueron relevados. Zaisser recibió un mando administrativo en una escuela del KPD en Benicasim que era como un balneario para descansar. No obstante volvió al servicio activo para hacerse cargo del mando militar en Albacete de todas las bases interbrigadistas. Con la retirada de las Brigadas Internacionales, partió a Moscú. Un destino muy peligroso para los ex-brigadistas sin patria y adoptados por Moscú. Y en efecto, le metieron en la cárcel hasta que estalló la Gran Guerra Patria. ¿Por qué lo hicieron, si Zaisser no tenía mal historial militar? ¡Vaya usted a saber! Era su primer gran tropiezo en su carrera de funcionario del comunismo internacional. En esos años de duros combates con los nazis, Zaisser se movió entre los prisioneros alemanes en manos de Rusia, que cada vez eran más. Su objetivo eran los generales, mandos y oficiales para el futuro ejercito de la RDA. En 1947 marchó a Alemania pasando del PCUS a SED Partido Socialista Unificado que era como se llamaba el Partido Comunista en la RDA. Alcanzó el Comité Central del SED y fue jefe de la Policía Secreta, la temida STASI. En julio de 1953 se produjo una revuelta entre los trabajadores alemanes, descontentos de sus condiciones de trabajo que rápidamente fue aprovechada en los términos de la guerra fría, por las fuerzas derechistas aun presentes en la RDA para provocar una rebelión en toda regla. Zaisser como director de la Stasi no quiso reprimir las manifestaciones y fue acusado por la línea dura del SED, de Walter Ulbricht prácticamente de traición al partido. Relegado a la nada, Zaiseer trabajó de traductor hasta su muerte en 1958 en Berlín. A la caída de la RDA, Los comunistas alemanes rehabilitaron su nombre. |
Zalka, Mata o Matei (General Lukacs) (1896-1937)
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Arturo Zanoni
Fue comandante de la XII B.I. durante algún tiempo. |